ALICANTE. Me pregunto si puede haber alguien que no conozca a La Familia Addams, ese núcleo familiar excéntrico, medio gótico, un poco monstruoso que se coló en la cartelera mundial en 1991, aunque procedían de una serie del mismo nombre de mediados de los 60 emitida por ABC. La sintonía quizás es uno de los elementos más recordados con aquel chasquido de dedos, junto con las magistrales interpretaciones de Raúl Juliá y Anjelica Huston, como los enamorados Gómez y Morticia. Ahora llega a Alicante, al Teatro Principal, el musical de La Familia Addams del 21 al 24 de marzo.
Humo, escenarios que se mueven y cambian, fantasmas, bailes y canciones que se te graban en la cabeza; eso este musical, un tiovivo, un ir y venir de acción sobre el escenario. Aunque los Addams son muy 'especiales', el drama llega a sus vidas a través de su icónica hija, Miércoles, que se enamora de un chico 'normal', Lucas Beineke, y planean casarse. Con esa premisa comienza el espectáculo. Entre el elenco tenemos a Xavi Mira, un experimentado actor alicantino que tiene la difícil pero apasionante tarea de interpretar a Gómez. Mena nos cuenta cómo llegó a tan conocido personaje. “Dani Anglés, que era el director de casting, me llamó para ofrecerme la prueba de Gómez y a partir de ahí consideró que tenía que hacer el papel”. Xavi baila, canta y actúa genial, recoge todas las poses y gestos del Gómez cinematográfico, la dificultad del trabajo de un actor de musical, parece ser mucho mayor. “Ser actor de musical no es más fácil o difícil, la complejidad viene dada por el texto y por cuales son las situaciones por las que transita la función”, explica Mira. Aunque también reconoce ese grado de dificultad añadida. “Es cierto que tienes que tener una preparación especial en cuanto a canto y a baile, que en el teatro textual no se necesita. Sí hay una dificultad en ese aspecto, pero radica más en cuáles son las características de los personajes y las situaciones que viven”, describe.
Sobre el escenario vemos a la familia al completo, los fantasmas y también a la familia Beineke. Todos están en su papel, cantando o bailando. El nivel de coordinación es muy elevado, logrado a base de muchos ensayos y profesionalidad. “El proceso de ensayos de un musical, va por partes: al principio se ensayan las escenas, se hace un trabajo de mesa para analizar cuáles son los objetivos de todos en la función y cuáles son los objetivos concretos de cada personaje. Luego se monta y se pone en escena”, relata el actor alcoyano. Detrás del montaje hay muchas horas de trabajo, algunos de ellos un poco más invisibles, “al mismo tiempo – prosigue Mira - se van sumando otros departamentos, la coreografia y la música, y poco a poco esos tres departamentos van uniéndose y van necesitando unos de otros. En nuestro caso estuvimos 5 semanas de ensayos”.
Como comentaba al principio del artículo, Los Addams son muy conocidos a nivel mundial, e interpretarlos puede suponer un reto, porque el público puede esperar otras cosas. “Siempre es un reto traer o montar cualquier función de teatro, en este caso son unos personajes muy carismásticos que la gente conoce muy bien y no era fácil, pero también tiene unas garantías de éxito”, reconoce Mira, y apostilla con tranquilidad, “yo me lo planteé como un personaje más, como una función más”. Xavi ha navegado en sus interpretaciones por diferentes géneros como pez en el agua. Me encuentro igual de cómodo en el registro de comedia que en el drama. La dificultad siempre la conllevan los personajes y las situaciones", comenta el versátil actor.
Este jueves se estrena el musical en Alicante, su tierra, algo que siempre hace ilusión por sentirse más arropado, y también más observado. Jugar en casa nos genera más presión, como si tuviéramos que hacerlo mejor que en otros lugares. “Es una presión que se ejerce uno mismo, va a haber gente que te importa mucho a nivel personal, y eso siempre pesa más”, reconoce Mira. La reacción del público está siendo fantástica. En las butacas ves caras de ilusión, de sorpresa, “estoy seguro que el público alicantino va a reaccionar como en todas partes, la obra gusta, salimos siempre con la sensación de que la gente se lo ha pasado muy bien, y así nos lo confirman a la salida, porque mucha gente se espera para darnos su opinión y hacerse una foto”. Y, ¿quién no querría hacerse una foto con los Addams, si son parte de la historia del cine, la televisión y ahora el teatro? Mira se muestra muy entusiasmado, “estamos convencidos que en Alicante va a ser lo mismo”, sentencia.
Con tantos años en la interpretación, el actor nos relata una anécdota, que sucedió en el teatro que verá a los Addams en Alicante. “Recuerdo que hace muchos años, en el Teatro Principal de Alicante, lo visité con un amigo, Ximo Llorens, un autor valenciano muy estrenado en València. La obra se titulaba El últim pecat de William Shakespeare, íbamos vestidos de forma isabelina, con unos leotardos negros, que dejaban entrever un poco las piernas, y uno de nuestros compañeros se le olvidó quitarse los calcetines de deporte blanco, con rallitas azul y negras, y se le veían claramente por debajo del leotardo negro” recuerda Mira con una sonrisa. “Imagínate, en época isabelina y este señor con unos calcetines de jugar al tenis. Fue muy gracioso, hasta que pudo entrar y cambiarse”, termina medio riendo.
Xavi a interpretado a muchos personajes, Gómez es especial, un tipo muy carismático, afable y cae muy bien al público. Cuando un actor convive tanto tiempo, en tantas funciones, con su personaje, lo termina conociendo muy bien. “Lo que me gusta de Gómez y lo que no, es que es un ser muy bipolar, y pasa de la alegría al llanto con una facilidad enorme”, admite como crítica. La bipolaridad de Gómez le da un carácter especial al personaje, “eso trae ocasiones muy divertidas y otras que no lo son tanto, esa impulsividad y poca reflexión a la hora de hacer cosas, es lo que necesitamos para tomar decisiones en la vida, y otras veces precisamente esa forma alocada de tomar decisiones no nos sale tan bien”. El musical te lleva a otro nivel, y además, hace que te reencuentres con aquellos personajes maravillosos que dirigió Barry Sonnenfeld en 1991, como Fétido, Pugsley o la abuela.