PARÍS (EP). El boxeador español José Quiles ha asegurado que su derrota en cuartos de final de los Juegos Olímpicos ante el uzbeko Abdumalik Khalokov, campeón del mundo de la categoría de 57 kg, ha sido "un palo enorme", ya que finalizó el segundo asalto pensando que lo había "ganado" y creyendo que todo se decidiría en el tercero.
"No sabía las puntuaciones. Me he ido a la esquina pensando que había ganado, que el tercero era lo que iba a decidir todo, y ha sido un palo enorme", declaró a los medios de comunicación. "Lo único que quiero ahora es intentar relajarme, estar con mi familia. Han sido meses y años fuera de mi casa, desde los 13 años llevo luchando por una medalla. Me he quedado a las puertas y estoy jodido", añadió.
Además, el de Elda reconoció que en el primer 'round' sí se vio sorprendido. "El primer asalto me lo ha ganado, me ha sorprendido la velocidad, la explosividad que tenía. A partir de ese asalto ya le he empezado a coger el tiempo, la distancia, los golpes claros han sido mínimos, dos o tres, pero han sido míos", afirmó.
"Él solo ha puesto su mano delante, se movía, corría y se agarraba. No quería, solo quería que pasara el asalto y ya", indicó. "Ya se verá si salto otro ciclo a otro peso, ya se verá qué pasa. Solo quiero, estar con la familia, descansar mentalmente", expresó.
También desveló qué le dijo a su rival tras terminar el combate. "Le he deseado toda la suerte del mundo, que intentase ganar el oro, y que si perdía, que por lo menos perdiese con el campeón. Arriba quiero destrozarle y abajo, tal como suena la campana, le deseo todo lo mejor del mundo", finalizó.