VALÈNCIA. Cada año se producen en España más de 150.000 lesiones relacionadas con accidentes de tráfico. La mayoría son de baja y media intensidad, pero requieren atención temprana para el correcto diagnóstico y la total recuperación de los pacientes. En otras ocasiones, los accidentes de tráfico producen lesiones agudas o complican otras preexistentes, lo que puede limitar la calidad de vida de los afectados y afectadas.
La valoración e instauración de un tratamiento precoz tras un accidente de tráfico es esencial, tanto para minimizar las secuelas como para hacer una valoración médica de la gravedad de los daños sufridos. Cuando el vehículo es un coche, la lesión más frecuente en los accidentes de tráfico es el famoso síndrome del latigazo cervical, que se debe al efecto de la deceleración brusca.
Cuando el vehículo es una moto, las lesiones que se producen son tanto abrasiones superficiales por el roce contra el asfalto, como fracturas en miembros superiores (en humero, muñeca o codo) por impacto contra el suelo o contra otro vehículo, y fracturas en fémur, rodilla o tibia cuando no se llega a descabalgar de la moto.
Una de las lesiones habituales tras un accidente de tráfico es el llamado "latigazo cervical". Con esta denominación (también se llama esguince cervical) se conoce a la afectación de uno o más elementos del cuello a consecuencia de una extensión brusca del mismo y a una posterior una aceleración máxima hacia delante. La lesión aparece porque la inercia de la cabeza, sobre la que no actúa ninguna fuerza, se ve superada en el momento del impacto del accidente.
Este tipo de lesión se asocia a síntomas como dolor de diferente intensidad en el cuello y la espalda (que aparece inmediatamente o poco después del accidente), limitación de la movilidad, contracturas musculares, dolor de cabeza, mareos, acúfenos y, en algunos casos, parestesias u hormigueos en los brazos.
Otras de las lesiones usuales después de sufrir un accidente de coche son los traumatismos torácicos y las lesiones de las extremidades. En los casos más graves, hay traumatismos craneoencefálicos que pueden provocar desde una simple conmoción cerebral, hasta daños cerebrales adquiridos. Por último, no podemos olvidar que los accidentes de tráfico también son causa de muchas lesiones medulares, algunas de las cuales pueden ocasionar paraplejia o tetraplejia al accidentado.
Muchas lesiones músculo-esqueléticas y medulares requieren de diferentes profesionales médicos a lo largo del proceso de recuperación, siendo necesaria su coordinación para su curación o estabilización. Según explica la Dra. Eva Guisasola, jefa del Servicio de Rehabilitación del hospital Quirónsalud Valencia, el tratamiento de la mayoría de las lesiones provocadas por accidentes de circulación debe realizarse desde una perspectiva integral.
"En primer lugar, hay que tratar el dolor con un adecuado manejo farmacológico. Después, debemos aplicar un tratamiento fisioterápico en función de cada tipo de lesión, algo esencial para conseguir una buena recuperación funcional". En el caso del latigazo cervical, el tratamiento descontracturante se efectúa con "masajes, electroterapia y un programa específico de ejercicios para mejorar la postura y recuperar la movilidad".
La duración de estos tratamientos depende de cada paciente y lesión, y siempre deben individualizarse al máximo. "Para un latigazo cervical leve o moderado, el tiempo medio del tratamiento será de 1 o 2 meses, pero si es grave, puede llegar a prolongarse hasta 4 o 6 meses", añade la Dra. Guisasola. En todo caso, la inversión de tiempo y de recursos merece la pena.
"No tratar este tipo de lesiones correctamente puede acarrearnos secuelas de distinta índole, desde el dolor crónico, a las lesiones neurológicas persistentes o las limitaciones funcionales que condicionarán nuestras actividades diarias, laborales, sociales o deportivas". Además, la especialista en rehabilitación de Quirónsalud Valencia incide en la importancia de saber actuar ante un accidente de tráfico.
"Si el impacto es de gran envergadura, debemos esperar a que acuda la asistencia sanitaria al lugar del accidente. Si es leve, debemos acudir a un centro médico especializado para que se realice un examen exhaustivo del accidentado con el fin de poder establecer un diagnóstico completo de las lesiones y su alcance, y aprobar la indicación terapéutica adecuada".
Una Unidad de Tráfico es un servicio médico diseñado para atender a personas que han sufrido accidentes de tráfico.
Esta unidad está formada por un equipo multidisciplinar que incluye a especialistas en traumatología, neurología, rehabilitación y fisioterapia, y una de sus principales características es su atención constante y continua, 24 horas y 365 días al año.
Los servicios de la Unidad de Tráfico de Quirónsalud pueden ser solicitados por todo el mundo y no es necesario tener un seguro médico contratado para solicitar sus servicios. De hecho, para ser atendido en esta Unidad, únicamente se debe acudir al servicio de urgencias de Quirónsalud Valencia, desde donde se realizan todos los trámites administrativos y las gestiones relacionadas con la compañía aseguradora del vehículo.
Las Unidades de Tráfico de Quirónsalud disponen de todos los recursos y de rápido acceso a servicios de apoyo (resonancia magnética, TAC, ecografía, laboratorio y quirófano) que, junto al resto de personal del hospital, garantizan la seguridad de los pacientes.
Desde esta Unidad, Quirónsalud Valencia pone a disposición de sus pacientes una atención global e inmediata, que incluye primera visita de urgencias, hospitalización, pruebas diagnósticas, consultas con los diferentes especialistas, médico rehabilitador, tratamiento de rehabilitación, unidad de cuidados intensivos y, en caso de ser necesario, cirugía urgente.