Puig hace tabla rasa al estilo PP y baja tasas sin tener en cuenta la renta

VALÈNCIA. Uno de los asuntos recurrentes en la política nacional y también en la valenciana son los reproches constante entre los dos grandes partidos PSOE y PP a cuenta de las medidas fiscales. Los populares, con la llegada de Alberto Núñez Feijóo y especialmente en este momento de alta inflación, exigen al Gobierno de Pedro Sánchez que baje los impuestos. Los socialistas, por su parte, critican que el PP siempre lo pide cuando está en la oposición pero luego los sube cuando está al frente del Ejecutivo.

Un debate que sale de Madrid y también aterriza en la Comunitat Valenciana. Es más que habitual escuchar los reproches del presidente del PPCV, Carlos Mazón, y de su secretaria general y portavoz en Les Corts, María José Catalá, al Consell del Botànic por no bajar los impuestos, al igual que la defensa y contragolpe de Puig para no hacerlo. Aunque luego, de alguna manera, acabe haciéndolo.

Ese es el caso del decreto ley aprobado este viernes, por el que se regula la bonificación del 10% de las tasas propias y precios públicos gestionados por la Generalitat hasta el 31 de diciembre de 2022. Una medida ideada en la sala de máquinas socialista que, sacaba pecho la Generalitat,  "beneficiará directamente a un total de más de 1.300.000 valencianos y valencianas" con "un ahorro de costes para las familias y empresas valencianas cercano a los 30 millones de euros".

Una iniciativa que, no obstante, sorprende por su carácter de tabla rasa, algo que no ha agradado especialmente en sectores de los socios de Puig, Compromís y Unides Podem, precisamente porque deja fuera uno de los argumentos fundamentales que a menudo se utiliza para rechazar las bajadas de impuestos que esgrime el PP como la del IVA: la diferencia de renta entre los ciudadanos que se benefician de la reducción de una tasa. 

Curiosamente, las tasas que ahora Puig decide rebajar fueron modificadas al alza por primera vez desde que el Botànic llegó al poder en 2015 en la Ley de Medidas Fiscales de la Generalitat para este 2022. Un ascenso general de un 1,9% de estos gravámenes que, ahora, tras la crisis por la invasión rusa a Ucrania, ha provocado el volantazo del Botànic, que pasa a bajarlas un 10% y dejarlas, por tanto, muy por debajo de los niveles en los que se mantenían en la última etapa de gobierno del Partido Popular.

Además, se bonificarán todas las tasas sin distinción y en el mismo porcentaje. Ello incluye desde las que se pagan por la expedición de la cédula de habitabilidad de viviendas, las de autorización de entrada en servicio de vehículos ferroviarios, la expedición de permisos de transporte por carretera o hasta las tasas de apertura que pagan los bingos o los casinos, por citar algunos ejemplos.

Metro y TRAM gratis los domingos... estilo Almeida

Otra de las medidas estrella anticrisis anunciada por Puig, la gratuidad de Metrovalencia y TRAM los domingos durante tres meses, también tiene cierto aroma al PP. Más en concreto, al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, quien en algo más de un año ha utilizado esta medida de forma puntual en cinco ocasiones.

Así, la primera ocasión fue en enero de 2021, cuando con motivo del temporal Filomena el alcalde fomentó el viaje libre durante tres días para desincentivar el uso del vehículo particular y garantizar así el transporte. Una medida que volvió a utilizar en la vuelta de vacaciones de verano; también con la celebración del Black Friday; con motivo del inicio de las Navidades pasadas y, posteriormente, con la vuelta al cole en enero. La última ocasión fue recientemente, al regreso de la Semana Santa.