La Cruz de los Caídos, situada en Calvo Sotelo. ALICANTE. Dos de los tres partidos que conforman el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante, PSOE y Compromís, matizan sus posiciones respecto a la pretensión de la Concejalía de Urbanismo de retirar del catálogo de protecciones los monumentos con referencias franquistas: la Cruz de los Caídos, ubicada en Calvo Sotelo, y el Monumento a los Caídos de la Vega Baja, en Aguamarga.
Tanto el alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, como el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, han apuntado que sólo apoyarán la descatalogación de esos dos monumentos en el caso de que exista algún tipo de incompatibilidad con las directrices que marca la Ley de Memoria Histórica. De hecho, ese es el argumento que esgrimió este miércoles el edil de Urbanismo y portavoz de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, al dar cuenta de su voluntad de revisar el documento, en respuesta a las peticiones formuladas desde la Comisión Cívica por la Recuperación de la Memoria y de la edil no adscrita, Nerea Belmonte. Pavón sostuvo que había hablado con los portavoces de PSOE y Compromís y que le habían mostrado su predisposición a apoyar esa descatalogación. Al menos, si existía una fundamentación jurídica que lo avalase. Es decir, justo en la línea en la que Echávarri y Bellido han insistido 24 horas después.
En realidad, los tres líderes del tripartito comparten una posición de partida. Los tres coinciden en que esos elementos se incluyeron en el catálogo elaborado por el PP por criterios técnicos y se han mantenido en la versión actual en base a esas mismas condiciones. Los tres admiten que, después, se aprobó y entró en vigor la Ley de Memoria Histórica que podría plantear alguna incompatibilidad. Y los tres comparten que los monumentos pueden tener valor artístico, estético y cultural, si se tiene en cuenta factores como la relevancia de sus autores: Miguel López y Daniel Bañuls.
Sin embargo, discrepan en cuanto a la oportunidad de retirar su protección por cuestiones políticas. Pavón ha recalcado este jueves que "se trata de dos objetos que se construyeron con el objeto con el que se construyeron, que fue el de exaltación de un bando que se sublevó, y consideramos que sigue teniendo ese objeto". No obstante, tanto Echávarri como Bellido han subrayado que no se puede modificar un documento por criterios partidistas, que al menos la Cruz de los Caídos dejó de tener el simbolismo que tenía cuando se modificó su inscripción bajo la Alcaldía de José Luis Lassaletta y que no existe ningún debate social sobre esa cuestión.
En principio, Urbanismo debe encauzar ahora la propuesta y, si corresponde, solicitar la emisión de informes jurídicos para fundamentar la posible descatalogación. Todo, a dos semanas de que se celebre el pleno ordinario del julio en el que se pretendía volver a debatir la propuesta de catálogo que no se aprobó en la sesión de mayo.
La propuesta de desprotección también ha provocado reacciones de los grupos de la oposición. El portavoz del PP, Luis Barcala, ha calificado de "lamentable el empecinamiento del tripartito en remover etapas ya superadas para intentar tapar su falta de ideas y la nefasta gestión con la que desgobierna la ciudad". Barcala ha criticado la propuesta del vicealcalde, Miguel Ángel Pavón, de retirar el monumento de la Cruz de los Caídos del documento del Catálogo de Protecciones, porque "no vulnera la Ley de Memoria Histórica".
El dirigente popular ha explicado que "con lo que hizo el exalcalde socialista de Alicante, José Luis Lassaletta, cambiando la inscripción para dedicarlo a todos los caídos se ha blindado el monumento, porque ya no tiene ninguna connotación franquista". Por tanto, el grupo popular considera que "jurídicamente tiene defensa que se mantenga como un monumento protegido y, además, se trata de uno de los casos expresamente excluidos por la ley".
"Seguramente el vicealcalde Pavón -ha añadido Barcala- hubiera vivido muy feliz en el Stalingrado de la era soviética, pero vive en Alicante y en el siglo XXI, así que por favor no hagan más tonterías y trabajen por el bien de la ciudad". El portavoz popular señala que "los técnicos, esos mismos en cuyo criterio se ha parapetado Pavón para defender el Catálogo de Protecciones, son los que han considerado que el monumento debe ser protegido, por lo que resulta imprescindible que ahora, se antepongan los criterios técnicos a los sectarios e ideológicos, pero ya sabemos de qué va esta izquierda rancia, vengativa y radical, que sin ideas solo tienen el discurso del enfrentamiento".
La portavoz de Ciudadanos (Cs), Yaneth Giraldo, por su parte, ha señalado que "el concejal de Urbanismo no puede descatalogar monumentos a su antojo, máxime cuando él mismo comunicó de que hay informes de los técnicos favorables a proteger tanto la Cruz de los Caídos como el monumento a los Caídos de la Vega Baja". "¿Por qué se incluyeron en el catálogo de bienes protegidos y ahora de repente quiere quitarlos? Hay que dar una respuesta sólida a eso; es lo mismo que con las indemnizaciones que pedían algunos promotores, que se sabían desde hace mucho de tiempo, y al final, también repentinamente, tuvo que retirar del catálogo la protección de determinados suelos urbanizables, rectificando a última hora y generando un clima de improvisación y chapuza", ha matizado la edil, quien ha añadido que "esto no es serio, y es el propio Pavón quien aumenta, aún más, nuestras reservas sobre el catálogo, un documento hecho a retales y cambios exprés".
"En el caso de los monumentos, no se puede gobernar desde interpretaciones viscerales de la ley de memoria histórica, Guanyar tiene una obsesión patológica con este asunto ya que lo retuerce a su antojo y conveniencia", ha puntualizado la portavoz de Cs, recordando al mismo tiempo que "la polémica ya se suscitó a finales de los ochenta y se optó por poner una placa en la Cruz de los Caídos en homenaje a todas las víctimas de la Guerra Civil". "Guanyar, una vez más, persigue la confrontación social provocando un debate artificial que no está en las preocupaciones de la mayoría social de los alicantinos, esperamos por tanto que el alcalde Gabriel Echávarri no caiga en esta nueva trampa que le tiende Pavón", ha puntualizado Giraldo.
