El president de la Generalitat, Ximo Puig. FOTO: Eva Máñez.La sociedad responsable de la infraestructura incluye una solución para las obras paralizadas durante años. Ximo Puig visitará hoy las instalaciones a medio construir
BENIDORM. La Sociedad Proyectos Temáticos ha incluido dentro de sus objetivos para le año que viene uno de especial importancia para Benidorm: el desarrollo de una solución para el Centro Cultural. Aunque la entidad no concreta más allá de esta afirmación, ni siquiera si hay partida presupuestaria para la misma, está previsto que durante la mañana de hoy haya una respuesta a tal efecto. Para ello, el presidente de la Generealitat, Ximo Puig, acudirá a Invat·tur para reunirse con las asociaciones relacionadas, y minutos más tardes se trasladará para visitar el estado en el que se encuentran las instalaciones, aún por terminar.
Puig ha transmitido al gobierno local su intención de desbloquear dicha parálisis, cuyas obras se detuvieron hace años por falta de financiación cuando el esqueleto del edificio se encuentra prácticamente finalizado, según afirma EFE.
Aunque las partes no han querido adelantar cuál sería la solución, al edil de Compromís, Josep Bigorra, le contestaron este año que el desbloqueo pasaría por negociar con la empresa ejecutora de los trabajos, la UTE Dragados-Rover Alcisa.
Cabe recordar que la primera piedra se puso hace diez años. Una obra que se sacó a licitación por 42 millones de euros, 25 más de lo inicialmente presupuestado para el primer proyecto del arquitecto Navarro Baldeweg del año 1997. El final de los trabajos llegaron por desavenencias entre el Consell y la UTE. Ésta última quería hacer una modificación en la obra que suponía el incremento del precio final entre un 10 y un 20 por ciento.
Desde que comenzara a construirse, muchas han sido las fechas de finalización de las obras. En un principio, enero de 2009. Tras unas meses paradas, volvieron los trabajos por unas semanas, y daban de tope el 2013, que tampoco se cumpliría. El aquel entonces vicepresidente de la Generalitat, José Císcar, admitía que había problemas económicos y que se terminaría antes del final de la legislatura, esto es, 2015. Pero tampoco hubo movimiento.
Como consecuencia, la mole de hormigón lleva abandonada en la avenida Europa desde hace años. Cerrada a cal y canto y con vallas alrededor para evitar que haya okupas o la gente se cuele para gamberradas. Con casi toda la estructura montada, el aspecto no es el mejor, con partes rotas a la vista del viandante y del turista, ya que se encuentra en la zona más importante para el visitante británico.
