El candidato Andrés García Trillo, este martes, en las escaleras del IES Jorge Juan, con los militantes que le han respaldado. Foto PEPE OLIVARESALICANTE. El mirlo blanco ya es un hombre público. El funcionario Andrés García Trillo se ha presentado este martes en sociedad ante la militancia del PSPV-PSOE de Alicante como precandidato a las primarias de Alicante. Lo ha hecho con todos los honores y respaldado por los principales dirigentes del aparato socialista local, entre ellos, Miguel Millana y el ex senador Ángel Franco. García Trillo se ha presentado como hombre de paz, ilusión y al que se le ha presentado una ocasión, la de ser alcalde de Alicante, que no piensa desaprovechar. Pero su predisposición no encaja en los tambores de guerra que se oyen en otras partes de la militancia. Sobre todo, la de sus oponentes en el proceso para elegir al futuro alcaldable socialista: tanto el sanchista José Asensi como la portavoz municipal, Eva Montesinos, ven en la elección del mirlo blanco otro "invento de Ángel Franco", respaldado tácitamente por la cúpula del PSPV.
El primero en discrepar de ese respaldo ha sido Asensi. En su comparecencia pública de este martes, para presentar la candidatura a las primarias, el dirigente sanchista ha censurado el aval del PSPV a la candidatura de García Trillo, y ha anunciado que presentará una queja ante el Comité Federal del PSOE, del que es miembro, en la reunión de este sábado. Esto puede sustraer el voto; debemos exigir transparencia en la agrupación socialista de Alicante", ha reclamado. En su intervención, Asensi ha puesto el acento en el que su candidatura está encabezada por "un socialista de verdad", con lo que ha querido marcar distancias con García Trillo, un independiente, que no es militante del PSPV-PSOE.
El sector que respalda a la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Eva Montesinos, también defendió este martes una posición similar. En primer término, fuentes de esta sensibilidad pusieron en duda que la dirección regional haya avalado a García Trillo como su candidato, ya que "hasta el momento nadie ha escuchado a ningún representante de la ejecutiva regional decir nada parecido". Es más, se considera que, de ser así, si realmente la dirección del PSPV ha participado en la designación de la propuesta de García Trillo, habría infravalorado a la militancia del partido al apostar por una persona sin carné y sin ninguna proyección social simplemente por el hecho de tener una profesión, como si en el partido no hubiese personas con igual o mayor capacidad para aspirar a ser candidato. En esta línea, el equipo de Montesinos insiste en que la propia precandidata mantiene su intención de continuar en el proceso sin contemplar una posible retirada antes de que se produzca la votación, el próximo 16 de diciembre (en primera vuelta).
Los contactos mantenidos con el propio secretario general de la agrupación local, Miguel Millana, en la mañana de este martes, sólo habrían conseguido reafirmar esa determinación. El entorno de Montesinos insistió, al término de ese encuentro, en que no se le había dado ningún argumento de peso por el que pudiese pensar que el precandidato lanzado por la ejecutiva local con la supuesta anuencia de la dirección regional, fuese el candidato de consenso que se había pretendido. Es más, la misma líder municipal del PSOE señaló, al ser preguntada por Alicante Plaza, que consideraba que la apuesta por García Trillo había reafirmado su convicción de que hizo lo que tenía que hacer al presentar su candidatura "porque no se ha planteado ningún perfil que encarne los valores de la izquierda mejor que yo". En esta línea, volvió a lamentar que ni la ejecutiva local ni la cúpula autonómica del PSPV hubiesen tratado de abrir una negociación antes de dar a conocer el nombre de ese tercer aspirante.
Sea como fuere, fuentes de la ejecutiva autonómica del partido rebatieron los argumentos esgrimidos por los sanchistas y por el entorno de Montesinos para recalcar que no habrá ninguna intervención desde València para tratar de desactivar las candidaturas en liza ni para ejercer ninguna influencia en el proceso. Las mismas fuentes insistieron en que, en todo caso, deberían ser las tres candidaturas las que intentasen un acuerdo por la integración, pero que, de no haberlo, se debe ser escrupuloso con el sistema que se delimita en los estatutos del partido para que sean los militantes y los simpatizantes quienes elijan al candidato que consideren idóneo.
