A nadie nos gusta que nos sancionen por aparcar mal, por pasarnos de velocidad en nuestras calles o por incumplir las ordenanzas municipales. Pero tras la indignación o el fastidio que supone una sanción, no podemos reconocernos como ciudadanos y ciudadanas que contribuyen el bien común, si no somos capaces de reconocer nuestros errores y poner en valor uno de los principales valores que tienen todas las administraciones locales, su cercanía a la ciudadanía, y en esa cercanía la Policía Local ejerce un papel fundamental.
El Ayuntamiento de Crevillent ha apostado por considerar a su Policía Local como uno de los pilares estratégicos de su acción de gobierno. No podemos olvidar que, aunque sus competencias en materia de seguridad están limitadas en la L.O 2/1986 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, en muchos municipios su labor en esta materia es fundamental y por ello, junto con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ejercen funciones que ponen en riesgo su vida y su integridad física a diario y que no podemos olvidar. Es importante saber sus funciones para conocer la importancia de su trabajo, al mismo tiempo que la necesidad de incrementar los medios y las plantillas.
Después de muchos años hemos logrado un acuerdo entre la representación sindical y el gobierno en materia de mejora de condiciones laborales de nuestra Policía, que tiene su base en retribuir objetivos y la ampliación de servicios en favor de la ciudadanía de Crevillent. No es propósito de este articulo magnificar o publicitar un gran acuerdo, sino aprovechar el mismo para decir a nuestra población que tiene una plantilla de profesionales a su servicio, comprometidos con nuestro pueblo, sean de aquí o sean de allá, y que la ciudadanía tiene y debe colaborar con ellos.
Hemos de reconocer que han ejercido un papel importante y determinante durante la DANA, junto a Protección Civil, que en la Pandemia y en los momentos más duros han estado siempre dispuestos a reorganizar sus servicios y a exponerse a diario en todas sus actuaciones frente al virus. No sería justo que ese compromiso con su pueblo no tuviese su valoración pública, ante la ciudadanía y también con una mejora de sus condiciones laborales, por las que han tenido que luchar durante muchos años para su reconocimiento.
Poner en valor a nuestra Policía Local, es hacerla más competitiva respecto a otras policías locales y evitar que esta administración pague su formación y su experiencia para acabar prestando los servicios en otra localidad, precisamente por esa falta de competitividad y esa merma en las condiciones.
Nos duele como vecinos y vecinas que muchos de estos magníficos policías, algunos de ellos nacidos en Crevillent, se hayan visto empujados a ejercer sus funciones en otro lugar a falta de expectativas y de condiciones dignas aquí.
Suele ser impopular hablar bien de los funcionarios y de las policías locales, pero no por ello voy a dejar de reconocer que la Administración, desde el conserje hasta el técnico superior, pasando por el auxiliar, ejercen en su mayoría con vocación de servicio público una inestimable labor a la ciudadanía. Sería injusto como alcalde no reconocerlo por temor a ganarme algunas críticas por mi defensa de la función pública que ejercen, más si cabe en el caso de la Policía Local.
Como toda organización o empresa siempre hay quien no ejerce sus funciones con profesionalidad, pero no por ello tenemos que desmerecer a la gran mayoría de profesionales que trabajan en las administraciones públicas. La Policía Local es un claro ejemplo de ellos.
En toda esta labor de poner en valor a nuestra policía, ha jugado y juega un papel esencial el concejal de Protección Ciudadana, Josep Candela, que ha sabido implantar una política de cambio dirigida a convertir la Policía Local en un elemento estratégico de la ciudad y lo ha hecho desde el conocimiento personal de cada uno de sus integrantes, sacando lo mejor de cada uno.
Todo es mejorable en esta vida, pero sólo es posible si hay voluntad de mejora y reconocimiento mutuo de nuestras propias limitaciones, el acuerdo alcanzado es una manifestación de ello. No ha sido una negociación fácil. Como en toda negociación, sujeta a altibajos. Es por eso que es de justicia reconocer la labor de la parte sindical en defensa de los intereses de los trabajadores y trabajadoras de este Ayuntamiento y en este caso de la Policía Local. Esa defensa, es la que propiciará un mejor servicio a la ciudadanía.
Los crevillentinos y crevillentinas tenemos muchas cosas para sentirnos orgullosos, fiestas declaradas de Interés Turístico Internacional y singulares fiestas de barrio, grandes coros, bandas y artistas, hermosos parajes naturales, muy buena gente solidaria, grandes museos y muy buenos emprendedores y trabajadores.
Apunto en la lista a la plantilla de la Policía Local, también es un sentimiento de orgullo tener un colectivo comprometido con su ciudadanía, muchas veces incomprendido, cierto, pero no por ello menos valorado y querido.
José Manuel Penalva Casanova es el alcalde de Crevillent.