VALENCIA. El Athletic Club visitará Mestalla con el objetivo de "dar primero" ante un Valencia "con problemas en casa" para tratar de revertir, según indicó su técnico, Ernesto Valverde, su racha de resultados lejos de San Mamés, donde no gana desde que lo hiciera el pasado 21 de septiembre en Granada.

"No es una garantía de victoria, pero ponerse por delante significa que das el primer golpe. Dejar pasar el tiempo para después ir a por el partido es algo que no van con nosotros. Debemos tener ojo con el desgaste, pero la intención es ir a ganar", subrayó Ernesto Valverde en la rueda de prensa previa al encuentro.

El técnico del equipo rojiblanco avanzó que después de "intenso" partido europeo del pasado jueves frente al APOEL hará cambios en la alineación a la vista del "cansancio" y los "golpes" recibidos por algunos de sus futbolistas en el encuentro ante los chipriotas.

La principal duda de Valverde es el estado físico de Mikel Balenziaga, que ya fue sustituido el jueves por unas ligeras molestias, y que en caso de no poder ser alineado sería relevado en el once por Enric Saborit o Íñigo Lekue.

A pesar de las variantes que introducirá en el equipo titular Valverde quiere que el Athletic se mantenga "fiel a su estilo" en Valencia e imprima "intensidad" al juego frente a un rival que "a pesar de estar abajo, tiene capacidad para llevar la iniciativa, para salir a la contra y con un centro del campo muy creativo".

"Lo que más me preocupa del Valencia es el nivel y el potencial que tiene. Es verdad que a veces se le tuercen los partidos y lo acusan desde el punto de vista anímico, pero es un equipo que va a estar junto y que su afición está mentalizada para empujar y salir de la situación en la que están", explicó.

El 'Txingurri' añadió además que en las últimas semanas, y a pesar de la goleada encajada en su último partido en casa frente al Eibar, ve al equipo 'che' "mejor que antes". "La dinámica que llevan es más positiva que la anterior y espero un partido complicado", apostilló.

Valverde, por último, considera que pese a las críticas que recibe el juego del Athletic considera que "en líneas generales la gente reconoce y se reconoce" en el equipo y ve en esa exigencia un "reconocimiento implícito" de los méritos de sus jugadores.

"Cuando estás acostumbrado a estar muy arriba, a conseguir buenos resultados y bajas el nivel todo el mundo está más incómodo. La gente se ha acostumbrado a que el equipo tenga más nivel y hay tendencia a estar insatisfecho. Las dinámicas positivas se han convertido en costumbre y eso hace que siempre queramos estar a un nivel alto", reflexionó.