VALENCIA. El ciclista colombiano Rigoberto Urán (Cannondale-Drapac) se ha llevado el triunfo en la 98ª edición de la clásica Milán-Turín, un recorrido de 186 kilómetros en el que se ha impuesto en solitario por delante del británico Adam Yates y el local Fabio Aru (Astana).
La clásica más antigua del ciclismo mundial volvió a ser un duelo entre escaladores en el que se impuso Urán con un tiempo 4:24:51, tomando el testigo de su compatriota Miguel Ángel López, ganador de la prueba en 2016.
Urán lanzó su ataque decisivo a tres kilómetros de la meta en alto, situada en la Basílica de Superga, y aventajó en 10 segundos a Yates y en 20 a Aru, mientras que el colombiano Nairo Quintana (Movista) concluyó cuarto a 28.
Tras su triunfo, el sudamericano reconoció que su ataque pudo llegar "un poco pronto". "Pero quería probar desde lejos porque me siento en muy buena forma y conozco muy bien esta ascensión. Ganar es sensacional, pero para mí lo importante es disfrutar compitiendo tanto como lo hice en el Tour de Francia", explicó tras la carrera.