ELCHE. La futura ciudad deportiva del Elche CF se aleja por el momento del Camino de Castilla, aunque no se descarta, mientras que el club plantea un paso 'intermedio' que pasa por la adquisición de terreno junto al estadio. Una prioridad del club que se materializaría mediante una operación urbanística que el Ayuntamiento ve con buenos ojos. En este caso, la entidad franjiverde podría disponer de los terrenos dotacionales municipales que están en la zona de Preferencia y que son propiedad de la familia del empresario Porfirio Pascual, a quien la entidad ha trasladado una oferta por la cual están ahora negociando. Un movimiento que de fraguar, acabaría en una permuta con el Consistorio. No es la superficie definitiva que busca el club, que sigue buscando su ciudad deportiva, pero es una operación más rápida para salir del paso y que también pretende 'estimular' todo el entorno.
35.000 metros para poder construir dos campos de entrenamiento
En este sentido, este miércoles se reunían en el Ayuntamiento el edil de Deportes Vicente Alberola, la concejal de Urbanismo Ana Arabid y técnicos municipales con una delegación del club encabezada por el presidente Joaquín Buitrago dentro del marco de reuniones periódicas para analizar este asunto. Con la mencionada operación, el Consistorio está dispuesto a permutar con el club unos terrenos calificados en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) como suelo dotacional público aunque de propiedad privada —de la familia de Pascual—. En el caso de que el club adquiera este terreno, de unos 35.000 metros cuadrados, se cedería al Ayuntamiento y se realizaría una modificación puntual del PGOU, pasando a tener esta parcela aprovechamiento privado. Se permutaría por tanto la clasificación del suelo, por lo que el Ayuntamiento, en compensación, se llevaría esa calificación de terreno dotacional público a otra zona del entorno, como exige el Plan General.
Una operación con la que el Ayuntamiento está de acuerdo y que como ya contó este medio, daría para la construcción de dos campos de fútbol. Así, una superficie insuficiente para los varios campos que pretendía construir la propiedad, pero aún queda edificabilidad en dicha parcela, de unos 20.000 metros cuadrados de techo edificable —sobra para los dos campos—, por lo que se podrían construir estas instalaciones auxiliares (ampliar oficinas, alojamiento y enfermería), y en todo caso, también está presente la posibilidad de impulsar las mismas en los bajos del estadio. Eso sí, no se contempla como la ciudad deportiva definitiva, sino que sería un paso intermedio y mucho más ágil que intentar el complejo en el Camino de Castilla.