ALICANTE. El Intercity quiere jugar su partido de la primera ronda de la Copa del Rey ante el Athletic de Bilbao en el poliesportiu de Sant Joan, pero eso ahora mismo no está claro que vaya a ser posible.

Para que lo anterior pueda producirse se han de acometer a lo largo de las próximas cuatro semanas unas mejoras en el sistema de iluminación de la citada instalación de titularidad municipal que no son menores, especialmente desde el punto de vista económico. Aunque la mañana del lunes la concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Sant Joan le aseguraba al club que las mismas serían una realidad, solo unas horas más tarde el mensaje no era tan optimista desde Alcaldía. La situación se ve agravada por el hecho de que en el consistorio haya un gobierno de coalición, que el alcalde sea del PSOE y el edil de Deportes de Ciudadanos, pero especialmente porque la actuación requiere una desembolso importante ya que se han de instalar focos de 500-800 lúmenes (los actuales son de 120).

Hasta el miércoles no se sabrá si el partido es televisado (hay prevista al efecto una reunión entre la Real Federación Española de Fútbol y Mediaset que decidiría el día y la hora de inicio), pero si finalmente no es retransmitido tampoco parece que se pueda esquivar el problema y es que varios jugadores que participaron en el choque de la eliminatoria previa, disputado la semana pasada ante el Gran Tarajal, le han hecho saber al club "lo complicado que resultaba seguir la trayectoria del esférico". Es decir, que al temor a una sanción federativa se une el de que la imagen de la entidad y la localidad se puedan verse afectadas de manera negativa.

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