ALICANTE. Este jueves se cumple un año desde que el Elche anunció que Sebastián Beccacece sería su nuevo entrenador, una efeméride que llega con el equipo atravesando su mejor momento de juego y resultados.
Los franjiverdes ocupan por segunda jornada consecutiva la segunda posición en la clasificación, cuando restan 11 para que finalice la fase regular en LaLiga Hypermotion. Es decir, que de haber expirado esta el pasado fin de semana habrían ascendido de manera directa a LaLiga EA Sports, cumplido con creces el objetivo.
El 21 de marzo de 2023, después de dos intentos previos fallidos por no cumplir con los requisitos de la UEFA y a 12 jornadas para la finalización del curso liguero 2022/23, el técnico representado por Score Club (la agencia de Christian Bragarnik, dueño de la entidad del Martínez Valero) estampaba su firma en un contrato cuya vigencia se extiende hasta junio de 2024, en el que se contemplaba ya una ampliación de la duración del mismo si el equipo obraba el milagro de eludir el descenso la pasada campaña o logra el ascenso esta.
A su experiencia como segundo entrenador en la Selección absoluta argentina y en el Sport Boys y como principal en el Universidad de Chile (campaña 2015/16), Defensa y Justicia (en diferentes etapas), Independiente, Racing Club y como seleccionador nacional de Argentina sub-20, Beccacece empezaba a sumar la relacionada al Elche, en la elite del fútbol español y europeo: aunque el conjunto franjiverde no regateó el descenso y perdió los cinco primeros partidos ligueros en que le dirigió el rosarino, los números de este fueron mejores que los de sus predecesores en el cargo (de los últimos siete encuentros ganó tres, empató otros tres y perdió solo uno) hasta el punto de haber aspirado a la permanencia de haber sido así durante toda la temporada; con Beccacece, el Elche sumó solo un punto menos que aquellos con que contaba a su llegada cuando ya se habían disputado dos terceras partes del curso. Aunque empezó apostando por el 1-4-2-3-1 como sistema, pronto se abrió paso la apuesta de tres centrales y dos carrileros y, con el paso de las semanas, recuperó la mejor versión de futbolistas como Pedro Bigas, Clerc, John Chetauya o 'Tete' Morente, jugadores que son hoy fijos en su once, el rendimiento del equipo sobre el césped y en la clasificación (hasta cierto punto.
Aunque la semilla plantada brotó, con el verano la planta se secó parcialmente por las salidas de futbolistas importantes, la llegada de otros sin ritmo de pretemporada e incluso las lesiones como la de John. El arranque del curso 2023/24 fue decepcionante a todos los niveles (tras ocho jornadas el Elche era el peor descendido desde 2016), las críticas arreciaron (también hacia Bragarnik por haber apostado por un técnico sin experiencia en el fútbol español, para que armase sobre la marcha un equipo pensando en el curso siguiente, pero al que luego se le quitaron piezas claves) e incluso el propio Beccacece llegó a autoimponerse un ultimátum.