VALÈNCIA. El entrenador del Valencia, Rubén Baraja, dirigió este jueves la segunda sesión de la semana, un entrenamiento sin novedades respecto al estado de José Luis Gayà y Roman Yaremchuk, y en la que los futbolistas del equipo de Mestalla se siguieron preparando para el encuentro del próximo lunes frente al Barcelona.

El equipo, que está octavo en la clasificación liguera a un punto de la séptima plaza y cinco de la sexta, encara un encuentro vital para sus aspiraciones europeas y Baraja debe decidir si sigue dando continuidad al once que presentó ante el Betis o si vuelve a confiar en Hugo Guillamón, Sergi Canós o Dimitri Foulquier.

El lateral derecho francés podría ser el principal revulsivo a un once que busca conseguir la victoria a domicilio ante el Barcelona, algo que no ha conseguido en sus últimas ocho visitas, aunque Canós o Guillamón también podrían ser las novedades de esa alineación.

En cualquier caso, los jugadores se ejercitaron este jueves un día después de celebrar una comida en la propia ciudad deportiva de Paterna para convencerse de que Europa aún es posible.

De hecho, no es la primera vez que esto ocurre, pues la primera plantilla valencianista ya se reunió en la casa de Sergi Canós hace un par de semanas para cenar juntos y ’conjurarse’ por Europa antes de visitar el estadio de El Sadar, donde consiguieron la victoria.

También estuvieron en esa comida José Luis Gayà y Roman Yaremchuk, que este jueves no salieron al césped de la ciudad deportiva de Paterna y que previsiblemente se perderán el partido ante el Barcelona, para el que tampoco estará el central franco-guineano Mouctar Diakhaby, que volvió a la ciudad francesa de Lyon para seguir recuperándose de la luxación de rodilla sufrida hace casi dos meses en Mestalla.