ALICANTE. Cubierta Solar, empresa de la Comunidad Valenciana centrada en el autoconsumo fotovoltaico, está instalando las denominadas pérgolas, un producto versátil que protege del sol al tiempo que es capaz de generar electricidad. Una de sus últimas instalaciones permite así un doble uso, proteger los vehículos de una zona de aparcamiento, mientras que su instalación genera energía un 62% más barata que la procedente de la red.
Así ha sido la última instalación completada en el edificio de oficinas de la entidad tasadora de viviendas Valmesa, en Benidorm, que dispondrá de una instalación de 50 paneles que le permitirá una potencia de 16,5 kW para generar electricidad fotovoltaica de 23.497kWh al año, al conjunto del complejo. Valmesa apuesta por Cubierta Solar demostrando su interés por la innovación y la comodidad de empleados y visitas, que podrán disfrutar de la sombra sobre la que se genera energía solar.
Luis Navarro, responsable de Cubierta Solar, afirmó que “somos capaces de generar electricidad de la sombra, y comentó que la pérgola fotovoltaica “es una muestra perfecta de nuestro concepto de economía circular que tratamos de aplicar en nuestros proyectos para que aporte rendimientos económicos a los clientes. Una pérgola es un coste que sólo genera confort a clientes y trabajadores; con nuestra instalación fotovoltaica se convierte en un elemento que también reporta ingresos en forma de ahorro energético”.
La estructura compuesta por 50 paneles solares logra un ahorro energético importante, puesto que genera electricidad un 62% más barata que la ofrecida por la red. Mientras el coste medio en la energía convencional de la red está en 0,127 euros, la que genera esta pérgola fotovoltaica supone un coste de tan sólo 0,03 euros.
La pérgola fotovoltaica, utilizada por la empresa para proteger del sol a los vehículos aparcados, cuenta con acabados de pintura especial para ambientes marinos y anticorrosión; así como Stacbond, un material que aporta una solución adaptable a la propia estructura, y acabados en distintos colores, brillos y texturas. “Podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que con nuestros sistemas lo que generamos son ingresos y un aprovechamiento mejor de los espacios y de los recursos naturales sin impacto medioambiental alguno”, comentó Navarro.