Cada año, entre el 7% y 9% de los bebés nacen prematuramente en España. Descubre los factores de riesgo, los cuidados necesarios en UCI neonatal y los beneficios de la lactancia materna para mejorar la salud de los bebés prematuros.
ALICANTE. En España, los nacimientos prematuros representan aproximadamente entre el 7% y el 9% de los partos cada año, lo que equivale a más de 20,000 bebés que llegan al mundo antes de completar las 37 semanas de gestación. Estos nacimientos tempranos, conocidos como prematuros, requieren una atención especializada y presentan importantes retos médicos tanto para los bebés como para sus familias.
La prematuridad se asocia con mayores riesgos para la salud del recién nacido, ya que suelen necesitar cuidados específicos en la UCI neonatal para estabilizar sus funciones vitales y facilitar su adaptación al entorno extrauterino. A pesar de los avances en neonatología y en el control prenatal, la tasa de nacimientos prematuros se ha mantenido constante en las últimas décadas, influida por factores como la edad materna avanzada, el uso de técnicas de reproducción asistida y ciertas condiciones de salud de las madres.
Un parto prematuro ocurre cuando un bebé nace antes de completar las 37 semanas de gestación. La Dra. Marta Granados Miras, experta en neonatología, explica que los prematuros se clasifican en varias categorías según las semanas de gestación: prematuros extremos, grandes prematuros, moderados y tardíos. Esta clasificación permite evaluar de manera específica los cuidados que necesita cada tipo de prematuro.
En España, aproximadamente un 7-9% de los bebés nacen de forma prematura, lo que representa más de 20,000 bebés al año. De ellos, alrededor del 6% son prematuros tardíos, nacidos entre las semanas 34 y 36. Este número muestra que la prematuridad es una situación común que requiere recursos médicos y atención especializada para asegurar el bienestar de estos niños.
A pesar de los avances en el control antenatal, la tasa de nacimientos prematuros no ha disminuido. Según la Dra. Granados Miras, especialista en Pediatría, Neonatología y Urgencias Pediátricas en el Hospital Quirónsalud de Murcia, factores como el aumento en el uso de técnicas de reproducción asistida y la edad materna avanzada contribuyen a esta incidencia, ya que elevan la probabilidad de embarazos múltiples y, en algunos casos, requieren finalizar el parto antes de tiempo. Entre los principales factores de riesgo para un parto prematuro se incluyen:
Los bebés prematuros presentan inmadurez inmunológica, lo que los hace más propensos a infecciones y enfermedades. Según la Dra. Granados Miras, las complicaciones suelen dividirse en cuatro áreas: problemas respiratorios, metabólicos-digestivos, infecciosos y de neurodesarrollo. La monitorización en las primeras semanas es esencial para detectar y tratar estas complicaciones de manera temprana.
La Dra. Isabel González León, pediatra en neonatología, explica que los bebés prematuros enfrentan desafíos específicos en la UCI neonatal. Su principal reto es adaptarse a la vida extrauterina. Para ayudar a los bebés, la UCI aplica cuidados centrados en el desarrollo, simula la vida intrauterina y proporciona el sustento necesario, tanto respiratorio como nutricional.
En sus primeras horas, los bebés prematuros reciben monitoreo intensivo en una incubadora para regular la temperatura, la humedad y los signos vitales (frecuencia cardíaca, tensión arterial, frecuencia respiratoria, saturación de oxígeno, temperatura). Cada tratamiento es personalizado según las necesidades del bebé, brindando el soporte respiratorio y nutricional requerido.
Una de las prioridades de la UCI es involucrar a los padres en los cuidados de sus hijos. En el Hospital Quirónsalud Murcia, la Unidad Neonatal mantiene puertas abiertas para que los padres puedan estar presentes las 24 horas, lo que facilita el contacto piel con piel, o método canguro, y fortalece el vínculo familiar. "El contacto piel con piel ayuda a mejorar la lactancia materna y contribuye al bienestar emocional del bebé y sus padres," señala la Dra. González León.
Según la Dra. Adalgisa De Caro, el Método Madre Canguro (MMC) consiste en colocar al bebé en contacto directo piel con piel sobre el pecho del padre o madre, lo cual permite regular la temperatura, ritmo cardíaco y respiración del bebé. Esta técnica ayuda a los bebés prematuros a ganar peso, reduce el tiempo de ingreso hospitalario y favorece la lactancia materna. "El MMC también promueve una relación amorosa entre los padres y su hijo," asegura la Dra. De Caro.
El seguimiento de los bebés prematuros tras dejar la UCI es crucial para detectar y tratar cualquier problema en el desarrollo. La Dra. De Caro enfatiza que este seguimiento, idealmente, debería extenderse hasta los 5-7 años o hasta el final de la edad pediátrica. "Un equipo multidisciplinar realiza revisiones periódicas, que incluyen controles en pediatría, neuropediatría y oftalmología," explica.
Aunque los avances en neonatología han mejorado las tasas de supervivencia y reducido las secuelas, algunos bebés prematuros pueden desarrollar problemas a largo plazo. Las secuelas más comunes son alteraciones neurosensoriales, problemas de desarrollo neurológico y riesgo de síndrome metabólico. Estas complicaciones están directamente relacionadas con la edad gestacional y el peso al nacer del bebé.
El Dr. José Luis Alcaraz, jefe de pediatría y neonatología en el Hospital Quirónsalud Murcia, asegura que la lactancia materna proporciona beneficios únicos a los bebés prematuros, entre los que se destacan una mejor digestibilidad y una reducción de infecciones. Además, la lactancia promueve el desarrollo de la microbiota intestinal y reduce el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante.
La leche materna contiene anticuerpos, bacterias beneficiosas y factores de crecimiento que son esenciales para el desarrollo del sistema inmunológico y neurológico del bebé prematuro. "Su composición única se adapta a cada etapa del crecimiento del bebé," asegura el Dr. Alcaraz.
La enfermera Ana Sánchez explica que, en la UCI Neonatal del Hospital Quirónsalud Murcia, se utilizan dispositivos específicos para facilitar la alimentación de los bebés prematuros, como las sondas nasogástricas y la técnica dedo-jeringa. Estos métodos ayudan a los bebés que aún no coordinan la succión-deglución-respiración necesaria para el amamantamiento.
Las enfermeras especializadas en neonatología asesoran a las madres sobre cómo extraer y conservar su leche, apoyándolas para mantener la producción de leche materna y así asegurar que el bebé reciba los beneficios de la lactancia, incluso en su estancia en la UCI.
Solicita más información de la Uci Neonatal del Hospital Quirónsalud Murcia
El hospital Quirónsalud Murcia ha renovado recientemente la decoración de su UCI neonatal para ofrecer a sus pacientes un espacio más humanizado y un entorno más amable y cercano a sus pacientes que contribuye a su bienestar y pronta recuperación.
Además de las nuevas decoraciones, el hospital puso en práctica hace unos años el parto respetado para que las familias puedan vivir la experiencia del nacimiento de su hijo en un ambiente seguro en el que la madre participe de forma proactiva respetando al máximo el proceso fisiológico para que el parto curse con naturalidad.
Quironsalud Murcia cuenta con un gran equipo de profesionales (enfermeras, matronas, auxiliares, ginecólogos, matronas y pediatras), con una gran formación y conocimiento amplio de los beneficios de la humanización del parto, dispuestos a aconsejar, ayudar y acompañar a la paciente en el momento del parto.