ORIHUELA. Orihuela Sin Barreras, la asociación que lleva años luchando en la ciudad para acabar con las barreras arquitectónicas que sufren cada día las personas con discapacidad, ha rechazado formar parte de la mesa de accesibilidad del nuevo equipo de gobierno de Orihuela. Los motivos, aseguran, es la dejadez, falta de acción e interés de los responsables municipales en garantizar que se cumpla la normativa municipal ya no solo en lo que respecta a espacio púbicos, sino también en la concesión de licencias de apertura de establecimientos, eventos festivos y actos institucionales.
Desde la entidad, su presidenta, Carmen Díaz y su vicepresidenta, Belén Cascales, han denunciado que la mesa creada en 2016 por el entonces alcalde Emilio Bascuñana, se hizo precisamente a petición de la entidad pero que, en estos ocho años "no se ha hecho nada", motivo por el que rechazan formar parte de ella ahora. Entre las cuestiones pendientes han explicado que "tuvimos que trabajar de manera incansable en la modificación de la Ordenanza reguladora de actividades temporales con finalidad diversa, ya que cada vez que en una terraza se instalaba una plataforma con fines de accesibilidad era desmontada porque no constaba esa ocupación de vía pública en Ordenanza. Ya tenemos Ordenanza que lo regula desde 2 de febrero de 2019 y que en su Disposición transitoria primera se da un plazo de 18 meses para su total aplicación". Unos plazos que, denuncian, no se han cumplido.
La entidad ha puesto el foco además en las licencias de apertura a través de la declaraxción responsable. Este tipo de licencias permite a los establecimientos abrir sus puertas con ese declaración responsable, sin comprobar que se cumplen los requisitos que marcan la normativa en varias cuestiones, incluida la accesibilidad. "Hace poco un establecimiento ha abierto muy cerca de aquí (la Plaza Nueva). Tiene cuatro puertas de entrada, que dan a dos calles, y ninguna es accesible", han denunciado desde la asociación.
Sobre estas dos cuestiones, la entidad mantuvo a mediados de marzo una reunión con el concejal de urbanismo y Patrimonio, Matías Ruiz, quien se comprometió a dar respuesta en un máximo de dos meses. "Han pasado tres, y seguimos espezando", han denunciado.
El edil de Urbanismo, Matías Ruiz, ha lamentado la decisión de la entidad de no formar parte de la mesa de accesibilidad. A preguntas de Alicante Plaza, ha reconocido que "algunas cosas van con retraso", como ese control de las aperturas de nuevos locales. Sin embargo ha señalado que gracias al encuentro que se produjo en marzo, se han realizado alguna de las peticiones de la entidad, como la modificación de la entrada del edificio del Palacio de Rubalcava para hacerla más accesible, o el proyecto de reforma del Teatro Circo que se licitará en breve, para dotar de accesibilidad al baño. En cuanto a la comprobación de esas declaraciones responsables, el edil ha señalado que en los próximos días se va a mantener una reunión con diferentes concejalías para abordar esta cuestión, ya que con la llegada del verano, especialmente en Orihuela Costa, se están incrementando el número de peticiones de licencia de aperturas y terrazas.
La presidenta de Orihuela Sin Barreras, Carmen Díaz, ha contado además una llamada que recibió ahce unos días, cuando se presentó el cartel de las Fiestas de La Reconquista en los pozos de Cremós. "Me llaman de la Asociación de Fiestas para decirme que tenían una que darme una mala noticia, que se iba a presentar el cartel y me pedían que no fuese, porque no podía acceder. Ese lugar es de pública concurrencia y tiene que ser accesible. No sabemos por qué el Ayuntamiento lo ha permito y por qué los Moros, después de un documento firmado en 2022 para garantizar la accesibilidad, se permiten el lujo de realizar un acto en un lugar accesible".