ORIHUELA. Tres posicionamientos dispares se han dado este jueves en el debate de la moción presentada por el grupo municipal Cambiemos Orihuela para instar al Obispado de la Diócesis Orihuela-Alicante a que devolviera las dos parcelas municipales que ocupa el Colegio Diocesano Santo Domingo desde hace más de 20 años. Por un lado, la oposición insistía y recriminaba al equipo de gobierno que todavía no hayan actuado contra lo que califican de ilegalidad. Sin embargo, desde Cs por sus competencias en Urbanismo alegaban que estaban trabajando en la cuestión pero pedían paciencia por ser un expediente “complejo y con muchas aristas”. Sin embargo, el edil de Patrimonio, Rafael Almagro (PP) anunciaba que esta misma semana se le ha remitido un escrito al Obispado instándole a que devuelvan los terrenos antes del 15 de julio de 2022.
Esta situación se remonta a hace más de 20 años. En 1999 el Ayuntamiento acordó la cesión a la Diócesis de Orihuela-Alicante de una parcela de 214,53 m2 y otra de 2.407 m2 para la construcción de aulas y dependencias del Colegio Santo Domingo y con el fin de posibilitar espacios para actividades de extensión universitaria, según recoge la moción presentada por Cambiemos y en la que se expone parte del “Informe jurídico sobre propuesta de permuta de varios bienes inmuebles formulada al Ayuntamiento por la Diócesis”. Añade que esa cesión estaba condicionada a que la urbanización y edificación previstas se efectuara en el plazo máximo de cinco años, volviendo a titularidad municipal si no se cumplía. El colegio valló las parcelas y desde entonces las utiliza de forma privada como instalaciones deportivas.
En las legislaturas anteriores se han dado varios momentos para acceder a una permuta. La última en marzo de 2019 al tratar de llevarse a pleno. El acuerdo de la permuta recogía la cesión de la iglesia de San Agustín, catalogada de Bien de Interés Cultural (BIC) y valorada en 623.000 euros a titularidad municipal a cambio de cuatro viviendas ubicadas en la calle Subida de San Miguel, por valor de 31.000 euros, los terrenos que actualmente ocupa en la avenida Doctor García Rogel el Colegio Diocesano Santo Domingo –valorados por 549.500 euros y una compensación de 42.716 euros.
El 11 de noviembre, el Obispado remitió a la concejalía de Urbanismo y a la de Patrimonio un escrito en la que pedía que se retomara el procedimiento administrativo para alcanzar el acuerdo de permuta anterior. Exponía como argumento de presión que de no hacerse efectivo ese traspaso de titularidad de los terrenos, el desarrollo del alumnado se vería afectado, del mismo que la intención de ampliar y mejorar las instalaciones.
Uno de los cruces de reproches más insistentes en el pleno de este jueves vino a cuenta de quién hizo primero movimientos para reclamar esos terrenos. Desde Cambiemos insisten en que en 2013, durante la legislatura de Los Verdes y el PSOE, se le notificó al Obispado que esas parcelas debían quedar libres, una petición que quedó en vano. Sin embargo, Almagro les recriminó que eso no era cierto y que fue él quien inició las primeras acciones en 2015 para que así fuera.
El Obispado interpuso un contencioso administrativo por la decisión de la Junta de Gobierno Local de octubre de 2015 en la que se declaraba extinguido la cesión de la superficie. En septiembre de este año, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número uno de Elche concluyó en dar la razón al Ayuntamiento.
Desde el grupo socialista, su portavoz, Carolina Gracia, recriminó al equipo de gobierno, pero principalmente al edil de Urbanismo el doble rasero cuando se comete una ilegalidad en materia urbanística por un particular o por la Iglesia. “No puede ser que ustedes dilaten en el tiempo cosas que afectan a la iglesia y no para los ciudadanos” añadía.
José Aix, edil de Urbanismo se limitó a insistir en que se trataba de un proceso largo, y en el que estaban trabajando por lo que pedía paciencia. Tras anunciar su voto en contra de la moción, en el segundo turno de palabra no hizo uso de él. Almagro señaló que la Universidad de Alicante, quien se iba a beneficiar de la cesión de estos terrenos al Obispado para disponer de espacios para su uso, “dio pronto muestras de no querer hacer instalaciones”.
El edil de Patrimonio adelantó que esta semana se le ha remitido un escrito al Obispado para que ponga a disposición del Ayuntamiento los más de 2.600 m2 (entre las dos parcelas) antes del 15 de julio de 2022, “con apercibimiento expreso de que, en caso contrario, se pondrán en marcha forzosamente y a su costa los mecanismos de recuperación de oficio de sus bienes que corresponden a la Administración Local”.
No obstante, no queda claro si antes se alcanzará un acuerdo de permuta. Almagro se acogió a un informe de la asesoría jurídica en el que aseguraba que la permuta era equilibrada. Desde Cambiemos le insistieron en que la asesoría jurídica le facilitarían un “amplio abanico jurídico” para tomar una decisión u otra, por tanto “es una decisión política”. Almagro aseguraba que le hubiese gustado que saliera esa permuta por la iglesia de San Agustín, por su ubicación, lo que representa y su valor patrimonial. No obstante, añadía que hay abierta una negociación que encabeza la asesoría jurídica.
La moción, rechazada por el voto en contra de PP y Cs, sobre la que se debatió esta cuestión buscaba que además de acabar como calificó el grupo proponente, Cambiemos, con “una clara y manifiesta ilegalidad”, para devolver al Ayuntamiento sus terrenos, se daría solución al problema de falta de suelo municipal para destinarlo a instalaciones deportivas.