La Epsar proyecta el desvío de los colectores de La Nucía y l'Alfàs a requerimiento de la CHJ

MARINA BAIXA. La Generalitat Valenciana está ultimando el proyecto que permitirá reubicar los colectores que pasan por el dominio público de los municipios de La Nucía y l'Alfàs del Pi. Unas instalaciones que datan del 2002 y que no contaban con permiso de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). Es precisamente esta última la que ha enviado sendos requerimientos a los ayuntamientos para que retiren de los cauces esta infraestructura bajo amenaza de una sanción. 

Para ello, la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) ha sacado a información pública en las últimas semanas el proyecto de construcción y el estudio de impacto ambiental de las obras de remodelación de los colectores generales de las dos localidades de la Marina Baixa. En principio, las obras contarían con un plazo de 24 meses y un presupuesto base de licitación de 12,7 millones de euros.

El propio proyecto, fechado en junio de 2024, explica la cronología de los hechos. Es en 1989 cuando se redacta el Anteproyecto de Infraestructura Sanitaria de la Nucía y el Proyecto de Infraestructura General de l'Alfàs. No es hasta 1996 cuando llega el relativo a la Dotación de infraestructura sanitaria a los sectores situados al sudeste de La Nucía y al norte de l'Alfàs del Pi. El objetivo era crear una red que recoja parte de las aguas sanitarias de las dos poblaciones para tratarlos en la Edar de Benidorm. En él los colectores generales -titularidad de la Generalitat- se dispusieron por los cauces de los barrancos públicos "al ser los puntos bajos de ambos municipios facilitando así la recogida de las aguas", dice el expediente.

La obra se dividió en dos fases debido a su magnitud, la última de ellas se ejecutó en 2002 con el tramo de impulsión a la Edar y los colectores que llegan a las urbanizaciones del Cautivador y Montebello. "Todos estos colectores se realizaron sin la autorización administrativa de la CHJ", recoge la documentación aludida. Así, explican que en el 2017 la entidad requirió a los ayuntamientos la retirada de los mismos del interior de los cauces públicos, "incluyendo las respectivas sanciones económicas", lo que llevó al Ayuntamiento de l'Alfàs a la redacción del proyecto en 2021.

En éste se pretendía además del desvío, "mejorar las características funcionales de la red de saneamiento de las urbanizaciones del municipio, debido a los problemas de conservación que presentan algunas de las infraestructuras actuales".

Según explicaron desde el Consistorio alfasino a este diario, el Ayuntamiento tiene una notificación de la CHJ para sacar los colectores de los barrancos, pero no es de titularidad municipal, por lo que no pueden ejecutar el requerimiento. A su vez, informaron que sí que tienen problemas con esta infraestructura puesto que "están saturados y no funcionan como debieran", incluso con roturas, que en esos casos la Epsar sí que les ha dejado repararlos. Vista la situación, la administración local preparó un proyecto a la entidad valenciana haciéndose cargo de los trabajos para sacar los colectores con un presupuesto en torno a los 5 o 6 millones de euros. Pero fue rechazado por la Epsar con el compromiso de asumirlo ellos, para lo cual han redactado el proyecto que sale ahora a exposición pública. No obstante, para materializar la obra, tendrán que gestionar junto al Ayuntamiento la disponibilidad de los terrenos, según informan fuentes municipales.

Ahora, con este nuevo proyecto redactado por la entidad autonómica, se han plasmado estas ideas extendiéndolo al municipio de La Nucía y dándole "una mayor profundidad", según figura en el mismo. 

Actuación

A grandes rasgos, lo que se pretende con esta obra es renovar la red general de colectores que coincide en gran parte de su desarrollo por los cauces públicos. Para ello, desviarán su trazado hacia zonas en las que se eviten los "repetidos trabajos de reparación y los vertidos de aguas residuales al medio natural". Así, de no actuar, además de las posibles sanciones, se arriesgarían a posibles vertidos por el deterioro de los colectores actuales.

Al mismo tiempo, explican que en los tiempos de lluvia, si estas son muy torrenciales pueden llevar a arrastres de rocas y vegetación, lo que puede dañar y embozar estas instalaciones. De igual forma, tras estos periodos de precipitaciones el agua que se infiltra por el terreno puede penetrar al interior de las tuberías por las juntas y "ocasiona que el agua que llega a las estaciones de bombeo sean muy superiores".

Además de la falta de permiso, el proyecto señala que "durante la época de su construcción no se respetaron los márgenes de servidumbre de la mayoría de los cauces haciendo inviable el traslado de los colectores del lecho de los barrancos a los márgenes de servidumbre". 

Con ello, se dotará a las dos poblaciones de una red principal "renovada, evitando los problemas de filtraciones, erosión y dificultad de mantenimiento que presenta la actual ubicada en su mayoría en los cauces". En concreto, el ámbito de actuación se establece en gran parte del término municipal de l'Alfàs y en el sur de La Nucía, centrándose en el desvío de dos grandes ramales cuya traza coincidente con cauces naturales produce problemas recurrentes de vertidos y un alto coste de mantenimiento, en concreto, los que discurren por el denominado Riuet Sequet y por el Barranco Soler desde la urbanización San Rafael.