ELCHE (EFE). El Ayuntamiento de Elche multará con 3.000 euros a los que incumplan la prohibición de lanzar carretillas la noche del 13 de agosto, tradicionalmente conocida como la Nit de l'Albà, y que este año se ha suspendido, al igual que el resto de fiestas de la ciudad, por la crisis sanitaria de la covid-19.
El consistorio ha preparado un amplio dispositivo de control y vigilancia en los puntos donde tradicionalmente se han lanzado carretillas en años anteriores. Así, desde primera hora de la tarde de mañana se realizará un despliegue de 260 agentes de Policía Local y Nacional y otros 40 de la Guardia Civil.
También contarán con el apoyo de unidades motorizadas, la unidad canina y drones para garantizar la seguridad y extremar la vigilancia en el cumplimiento estricto de la normativa, según ha informado este miércoles, en rueda de prensa, el concejal de Seguridad Ciudadana, Ramón Abad.
El propio sector de la pirotecnia ha colaborado asimismo con esta iniciativa y este año no venderá carretillas en los puntos de comercialización tradicionales, aunque se extremará la vigilancia por si se traen de fuera.
Al mismo tiempo, se realizará una especial vigilancia para evitar botellones y sobre los establecimientos que intenten vender alcohol a menores de edad.
Por su parte, la concejala de Fiestas, Mariola Galiana, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad ciudadana para no convertir la Nit de l'Albà en un foco de contagio.
"No salgáis a las calles a celebrar la Nit de l'Albà, ni a las terrazas. Debéis ser responsables, si no queremos lamentar nuevos contagios innecesarios", ha dicho Galiana.
