ALICANTE. "Feliz, contento, orgulloso", así decía sentirse Sergio Mora tras el triunfo de su equipo sobre el Toledo, un resultado que le permite ampliar a cinco la racha de jornadas consecutivas conociendo la victoria, algo que confesaba que le lleva a premiar a sus jugadores con un día más de vacaciones (no regresarán al trabajo hasta el día 29, en lugar del 28 como estaba previsto inicialmente).
"Se lo merecen", decía el preparador madrileño, recordando a continuación que el choque ante el Toledo "era complicado" por precisamente la inminencia del parón de Navidad, la racha de victorias que ya se protagonizaba y que el rival llegaba necesitado de puntos por su delicada situación en la tabla: "Ya hemos visto que en esta Liga no hay nada fácil", insistía.
Para Mora, los suyos habían estado "bien con el balón", corregido tras el paso por vestuarios la falta de pausa de la primera mitad, las pérdidas provocadas "por la precipitación de querer llegar tan ponto al área" y sabido "abrir el campo y llegar por fuera". El técnico blanquiazul también ponía el acento en que se había mantenido la portería a cero, confiaba en mejorar el balance goleador en la segunda mitad del curso e insistía en lo contento que estaba "por el equipo, el juego y la victoria": "Seguimos haciendo muchísimas cosas bien y cada vez menos mal; llegamos a casi el ecuador con buenas sensaciones: empezamos bien, luego pasado por muchos baches, un par de meses en los que no estuvimos bien y acusamos las bajas, pero nos hemos sobrepuesto a la inercia mala y no se puede acabar mejor el año", recalcaba para, a continuación, aclarar que la sustitución de Nico se debía a "cansancio" y que la amarilla a Bikoro, que hace la quinta y será sancionado con un partido de suspensión, no es tan mala noticia si se tiene en cuenta que el guineano cumplirá ese castigo estando con su Selección.
Brindis
Tras su comparecencia, el técnico del Hércules quiso tener un gesto con los presentes en la sala de prensa del estadio Rico Pérez, invitándoles a brindar por las Fiestas.
Mora le pidió "salud" al 2022, pero ni él ni los presentes escondían el deseo mutuo de que no sea el último brindis del curso.
