BENIDORM. Cuando muchos están volviendo al trabajo por el final del verano, en Benidorm las tornas cambian y hay quienes lo pierden. Esto se ha comenzado a ver en el mes de septiembre, aunque el paro ha bajado tímidamente, lo cierto es que el número de afiliados a la Seguridad Social ha caído considerablemente. Así se refleja en los datos aportados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Sin embargo, la ciudad de los rascacielos sigue teniendo datos positivos si se compara con los datos de antes y durante la pandemia.
Para empezar, el dato de afiliados ha caído. En septiembre había 32.947 personas registradas, en agosto eran 34.014. Esto es, 1.067 menos, que en términos porcentuales es una reducción del 3,1%. Si se analiza en función del régimen, el general -donde se sitúan los del sector servicios- es el que muestra la misma tendencia, pasando de los 28.777 en agosto, a los 27.695 del mes pasado (una caída del 3,8%). Hay que tener en cuenta que la ciudad depende en casi su totalidad del sector servicios por su vocación turística.
Si bien es cierto que el dato de agosto de este 2023 es excepcionalmente bueno: superaban las cifras alcanzadas en agosto de 2019, cuando el sector turístico estaba en datos de récord. En aquel entonces había 33.191 afiliados a la Seguridad Social, es decir, 823 menos que el mismo mes de 2023.
Si se compara con septiembre de 2022, la evolución ha sido positiva. Eran 30.961 afiliados, esto quiere decir que un año después, hay 1.986 personas más. En cuanto al régimen, el general era de 25.912 (1.783 más en 2023), mientras que los autónomos han crecido hasta los 4.968 (205 más).
Por lo que respecta al paro, los demandantes de empleo también han caído. Aunque los motivos siempre son una incógnita, ya que no tiene por qué estar asociado a una mayor actividad, como se puede comprobar con los datos de afiliados. Detrás podría estar el desistimiento de buscar empleo o incluso haber dejado la ciudad. En cualquier caso, en Benidorm hay 3.473 demandantes de trabajo registrados en septiembre, nueve meno que en agosto.
En cuanto a la evolución entre el mes de agosto y el de septiembre por el servicio en el que están inscritos, baja en 22 personas en la construcción, mientras que sube en 12 en el sector servicios. Ambas son las categorías más destacadas en el municipio, en agricultura e industria son cambios mínimos. Al detalle, son 34 más que buscan trabajo en hostelería (1.029). La siguiente más numerosa es en el comercio, con 567, seis más que el mes anterior.
Finalmente, si se compara con septiembre de 2022, el dato es claramente inferior. Hace un año había 4.124 demandantes de empleo, es decir, hay 651 menos de un año para otro, un 15,8% menos. La evolución ha sido casi general. En agricultura hay 14 menos (se queda en 29 parados), la construcción tiene 42 menos (hay 240), en industria también baja en 18 (88 demandantes) y el más significativo es el de servicios, que pasa de 3.625 en 2022 a 3.058 (567 menos).
En cuanto a la calidad del empleo, también se puede analizar en función del tipo de contrato firmado en el mes de septiembre. En total fueron 2.973. Similar a agosto, cuando fueron 3.172, pero muy por debajo de los meses importantes de inicios de verano, como puede ser junio con 4.572. En cuanto al sector al que pertenecen, casi la totalidad fue para el de servicios, ocupando los 2.833. El siguiente, la construcción con 108. Lo reseñable es que de todos los nuevos empleos que se firmaron, 1.283 eran indefinidos, casi los mismos que temporales (1.187). De este modo, la tendencia a que los primeros ganen terreno sigue al alza. En los últimos dos años ha ido incrementándose y ahora suponen el 43,15% del total. Y resultan más cuota que los temporales.
En 2022 la cifra era parecida, y si saltamos el periodo covid, en septiembre de 2019 se puede ver cómo ha cambiado drásticamente el tipo de contratación. En aquel entonces, se firmaron 4.466 nuevos trabajos, de los cuales 424 eran indefinidos, mientras que los temporales eran 4.042.