ELCHE. La segunda parada de la VII edición del Venture on the Road, que se ha celebrado esta semana en el Parque Científico de la UMH, eligiendo como finalista a tu Trámite Fácil, dejó una keynote muy especial para el recuerdo, la formación y el desarrollo empresarial de los presentes. Impartida por el mentor, inversor y emprendedor Darío Méndez, cofundador de la exitosa app ElTenedor, sirvió para compartir su experiencia y, lo que más ansiaban escuchar los presentes, la "receta del éxito". Y no se trata de una fórmula que a priori pueda parecer muy complicada. De hecho la resumió en una simple palabra. La receta del éxito no es más que "vender". Algo tan sencillo y tan complicado a la vez, pues el camino hasta llegar ahí puede ser muy largo para aquellos proyectos que están en fase de desarrollo y que requieren de una gran inversión para obtener algo que finalmente se pueda vender. Por tanto, esa "receta del éxito" pasa por validar esos proyectos para poder tener el apoyo y los resultados deseados.
Méndez dio cuatro aspectos que hay que cuidar y tener muy en cuenta a la hora de que las startups echen a andar. El primero es el equipo. Al principio, suele ser muy reducido. Los ideólogos o ideólogas, la persona que lleva las cuentas y algún que otro comercial. "¡Todos a vender!", animó Méndez. "Muchas veces el contable, o el equipo jurídico te dice 'yo no, yo no sé vender, no estoy aquí para vender. ¿Quién mejor que quien conoce el producto de primera mano y está implicado en la empresa para darlo a conocer a los demás?", señaló. Así, señaló que es esencial que, sobre todo en las primeras etapas, todo el equipo, sea cual sea su función, salga a la calle a vender el producto que se pretende desarrollar. También insistió en la formación de ese equipo. "Cuanta más formación, más capacidad de venta". Y con la formación no se refirió solo a formación en cómo vender, sino en aquello que hay que vender.
El segundo ingrediente de esta receta para alcanzar los objetivos pasa por estudiar el mercado. "Hay que tener un oído ene l mercado, saber qué es lo que quieren los clientes, lo que esperan de vosotros y de vuestro producto. Sabes escuchar, tener el feedback. Tenéis que tener un oído en el mercado, y que el equipo sea el altavoz", subrayó.
El tercer aspecto que se ha de cuidar es la estrategia. En este sentido animó a centrarse en dos aspectos. El primero, el "focus contra el todo". Es decir, "a veces nos queremos focalizar en muchas cosas, desarrollar varios frentes, tener en todo. Es mucho más productivo poner el foco en un aspecto concreto, el que mejor se nos dé, el más útil y al que más rendimiento le podamos sacar". El otro aspecto es el buen reparto de roles dentro del equipo. Focalizar y desarrollar en cada persona aquello que se le da bien a cada miembro del equipo. "A medida que se va desarrollando el proyecto, hay personas a las que se les da mejor vender, otras son mejores atendiendo a los clientes una vez has vendido y otras pueden ser una máquina al teléfono. Saber identificar los roles adecuados de cada uno de los miembros del equipo puede ayudarte a progresar en la dirección correcta", señaló.
El cuarto aspecto es "la validación", señaló. En este punto, señaló que es fundamental tomar decisiones de forma rápida ante cualquier problema y señaló que "todo cambio es bueno. A veces nos asusta cambiar pero si algo hemos aprendido es que siempre es a mejor, aunque en el momento no lo parezca. Y si no lo es, vuelve a cambiar. Si realizas un cambio y no da resultados, no te empeñes, no ha funcionado. No esperes a ver si los da. ya está, has cambiado y no ha funcionado. Otro cambio".
No obstante, para poder llevar a cabo todas estas estrategias, Méndez señaló que un buen emprendedor tiene que tener cinco cualidades. La buena noticia en este sentido pasa porque no es necesario tenerlas desde un principio, pero sí desarrollarlas. De hecho, "yo no tenía ninguna de ellas cuando empecé a emprender", confesó. También es suficiente "con tener alguna de ellas y rodearse de gente que tenga el resto", matizó. La primera cualidad es la "humildad, que pasa por saber escuchar. Escuchar a quien tiene alrededor, a los inversores, a los socios, y al mercado". La segunda pasa por "tener ilusión, las ganas", la tercera el "esfuerzo. Si no estás dispuesto a sacrificar el tiempo, las horas, la energía hasta el final, no lo hagas", sentenció.
La cuarta cualidad es "el liderazgo. Pero, ¿qué es el liderazgo? Se suele decir que aquél que dirige personas es un líder. nada más lejos de la realidad. Un líder no es el que dice qué hay que hacer, sino que es el primero que lo hace. Es quien primero tira del carro, y quien, al hacerlo, hace que los demás tiren de él. Quien contagia esa ilusión, esfuerzo y energía para seguir adelante". La quinta y última es "el riesgo. Porque sí, emprender tiene riesgos, y si no estás dispuesto a asumirlos, mejor no lo hagas".