ALICANTE. El proyecto orgánico de Carlos Mazón ya ha comenzado a andar. Aunque de momento no es más que un pre-pre candidato, como él mismo ha reconocido, todo hace indicar que el próximo 18 de julio elegido presidente provincial del partido, que pondrá fin a la etapa de interinidad que vive el partido desde hace un año, cuando José Císcar renunció y Eduardo Dolón y Toni Pérez han tomado las riendas de la formación de manera transitoria. La comparecencia de Mazón deja a la luz algunas claves del modelo de partido que persigue. Estas son algunas de ellas.
La pretensión de Mazón es que el PP vuelva a la situación anterior al 26 de abril de 2019, cuando el PSPV recuperó el liderazgo electoral 29 años después. En esa fecha, los socialistas ganaron las elecciones autonómicas y generales y se convirtieron la fuerza más votado. el objetivo de Mazón, según ha dicho, es que el PP vuelva a ser a gran casa del centro derecha y un partido reconocible y confiable en su defensa de señas como el turismo o el agua.
A diferencia de lo que hubiera sido otra época, u otro momento, Mazón quiere mantener el mismo mensaje en el partido que en la Diputación de Alicante. Atrás quedan otras etapas de PP en el que partido era más beligerante contra València o las decisiones que emanaban desde allí -tampoco le han funcionado electoralmente en los últimos años-, el aspirante a presidir el PP sitúa a Alicante como un elemento positivo, de peso, para ganar influencia en València o en Madrid. El mismo lema del congreso exhibe esa idea: Más Alicante, més Comunitat. También ha destacado la defensa del PP del modelo de la España de las autonomías, algo con lo que se pretende marcar distancias con Vox, que defiende un modelo más centralizador. Mazón es consciente, por proceder en estos momentos del mundo empresarial (como gerente de la Cámara) que los empresarios no le comprarían ese discurso: ni el centralizador ni el antivalenciano porque, en su mayoría, hacen causa común por la infrafinanciación que recibe la autonomía. En ese caso, el presidente de la Diputación siempre aboga por exhibir diferencias en el plano ideológico o económico respecto al modelo del Botànic.
Ha defendido la existencia de las diputaciones provinciales y ha insistido en que son un "factor sumatorio" que "refuerzan" a la Comunitat Valenciana. "Tanto a nivel autonómico como nacional, les va a venir muy bien alicantinizarse", ha mantenido y ha considerado que la provincia es una de las "más cosmopolitas" de España, donde se refleja "la diversidad poblacional, lingüística y representa la tolerancia".
Mazón ha defendido este viernes la posibilidad de tener ese doble cargo: presidente de la Diputación/presidente del PP provincial. Cree que su doble cargo "ayudará" a la relación con Ciudadanos (Cs) en el bipartito que mantienen en la Diputación, con cuyos dirigentes mantiene una relación "excepcional" y "fantástica", pese a los gestos que los cargos de Ciudadanos, tanto en València como en Madrid, vienen manteniendo con Ximo Puig o Pedro Sánchez, respectivamente. "Al partido --PP--, le ha ido bien cuando ha estado bien encardinado con la Diputación", ha asegurado.
Ha dejado claro que no le preocupa que el PSOE se reúna en Madrid con Ciudadanos, y ha recordado que el equipo de Gobierno provincial ha pactado los presupuestos provinciales con Compromís: "El diálogo entre partidos es muy positivo". Y ha destacado que las ayudas para hacer frente al Covid se han tomado por unanimidad en la Diputación.
Y en este contexto de la relación con Ciudadanos, Mazón ha lanzado un guiño a aquellos que se marcharon del partido en otra época y que ahora están en otras formaciones, en clara referencia a varios cargos de la formación naranja que proceden de las filas del PP. El aspirante popular sabe que, como ya sucediera en los debates de una hipotética fusión entre P y Cs, que optar al liderazgo electoral pasa para evitar la división del voto, como ha sucedido en las últimas dos citas electorales, con el crecimiento de Cs el 26A o el auge de Vox, el pasado 10N.
Carlos Mazón está siendo muy cuidadoso en la elección de los equipos. Así lo demuestra no sólo la elección del equipo de campaña; en su momento, también lo fue el reparto de responsabilidades en la Diputación de Alicante. Intenta que todos tengan protagonismo y que los hombres más próximos a la antigua dirección provincial no se vean agraviados, y además, combina perfiles jóvenes, alcaldes consolidados y a algún gesto a etapas anteriores, con personas de su confianza. Curiosamente, Luis Barcala está en un segundo plano.
Con todo ello, el objetivo es que el proceso sea rápido, que pase desapercibido, sin roces y poner la maquinaria en marcha para que lo pueda pasar.