Antonio Marín es el encargado del Laboratorio de Prototipado del Parque Científico de laUMH y parte del equipo de siete personas que está en marcha mejorando cada día este prototipo de mascarilla FFP2, que consta de una carcasa de goma flexible, adaptable y con sistema de filtrado HEPA H13. La mascarilla desarrollada compensa el filtro tan agresivo que suelen tener las de este tipo, con el aumento del diámetro del filtro, ya que, al haber más volumen, también, se permite más flujo de aire. El prototipo propuesto puede cubrir el desarrollo de mascarillas FFP2, que es la que logra tener una mayor eficacia de filtración mínima del 98% y un porcentaje de fuga hacia el interior máximo del 2%, según el informe técnico "Covid-19 y uso de mascarillas".
Justo ayer se hizo pública la cuantía que el Consell otorga a este proyecto, 78.106,62 euros irán destinados a su prototipo de mascarilla de un total de 3,1 millones de euros previstos para los 41 proyectos. Mientras, financian el proyecto a través del programa de mecenazgo de la UMH. "Será un gran empujón para desarrollar el prototipo. Necesitamos financiación porque la I+d necesita de ese apoyo", asegura Marín.
"Ya tenemos la mascarilla en su modelo final, después de realizar diez versiones en dos meses y estamos en proceso de certificación con Aitex. Tenemos ya las mejoras y listas y esperemos que se pueda dar esa certificación lo antes posible para ponerla a disposición de los equipos sanitarios que la precisen", asegura Marín. Desde que comenzaron con el primer modelo en marzo hasta el nuevo resultado, la mascarilla ha experimentado muchas modificaciones según las recomendaciones técnicas y una diferencia sustancial de diseño.
El primer modelo de prototipo de mascarilla, que ahora ha evolucionado con mejoras. Foto: AP
La labor del Laboratorio de Prototipado de la UMH con esta mascarilla ha sido seleccionada por la Generalitat Valenciana, entre otros motivos, por la escasez de producción en España de este tipo de mascarillas de filtrado para el trabajo sanitario. De hecho, según aporta Marín, "cuando empezamos este trabajo solo una empresa en todo el país realizaba este tipo de mascarillas. Seguro que desde el Covid-19 ya hay más firmas capaces de fabricarlas o, al menos, investigando para ello, pero nosotros nos aseguramos de que nuestro prototipo cumpla con todas las normativas de seguridad y por ello seguimos mejorándola".
Ahora barajan varias posibilidades para su fabricación: O bien con el proceso de impresión 3D que ha sido el origen de este prototipo y que permite llevarlas al mercado rápidamente, o bien haciendo moldes de este modelo para permitir su producción masiva. Ya están en contacto con empresas de la zona para poder dibujar esta segunda posibilidad. Además, entre las posibilidades de mercado, además de cubrir las necesidades sanitarias dentro del país, también podrían ser exportadas una vez hechas.
"Nuestra meta es hacer una mascarilla segura, por eso llevamos más de 10 versiones hasta alcanzar el modelo de FFP2 que cumpla con todas las garantías. No queremos que suceda como en algunos casos, cuando empezó la pandemia, de empresas que decían hacer mascarillas FFP2 y luego no tenían una certificación o su filtro se basaba en material de toallitas", apunta el responsable del Laboratorio de Prototipado de la UMH. Para ello, desde el Parque Científico en la universidad en Elche, desde el primer momento cuentan con un sistema de filtración HEPA H13, que es el recomendado para la protección contra la Covid-19. Las principales trabas en su diseño han ido encaminadas a construir una mascarilla para este sistema de respiración con peculiaridades, porque presenta una gran resistencia. Por este motivo incluyen un sistema de filtrado de doble cámara para facilitar la respiración y reducir la sensación de dificultad a la hora de la inspiración.
Antonio Marín, responsable del Laboratorio de Prototipado de la UMH. Foto: AP
