ORIHUELA. La plantilla de Residuos Sólidos Urbanos y Limpieza Viaria de Orihuela decidirá la semana que viene si, finalmente, convocarán la huelga prevista para el 10 de abril o no. La decisión dependerá de una próxima reunión a principios de la semana que viene, entre los sindicatos CCOO, UGT, y CSIF y personal técnico de Recursos Humanos del Ayuntamiento de Orihuela en Consellería. Después de esta reunión, probablemente, el próximo 3 o 4 de abril se convocará una asamblea con los más de 100 miembros de la plantilla para dirimir la situación y decidir si seguir con los planes de huelga o desconvocarla.
Ambas partes, plantilla y Ayuntamiento están teniendo diversos encuentros para tratar de evitar la huelga. Esta decisión, la de los paros, es la última que quiere el Consistorio, que vería interrumpido un servicio esencial en plena Semana Santa. Tampoco es la que quiere la plantilla, perjudicada por las condiciones en las que deben realizar su trabajo diario y que no quieren afectar ni causar molestias a los ciudadanos, pero que se verían, dicen, abocados a esta decisión para lograr mejoras.
Lo que exigen pues, es una mejora de sus condiciones de trabajo, después de que las últimas reuniones con el equipo de gobierno, hasta ahora, no surtieran efecto ni se haya podido llegar a ningún acuerdo.
Por el momento, ayer hubo un nuevo encuentro entre los ediles de Recursos Humanos, Rafael Almagro, y de Residuos Sólidos Urbanos, Dámaso Aparicio, así como de personal técnico y los tres sindicatos que representan a los trabajadores. Aquí se pusieron sobre la mesa las mejoras para el servicio municipal que, de forma urgente, han comenzado a tramitar desde el equipo de gobierno de Orihuela. Estos son contratos de cuatro camiones, la mitad de carga lateral y la otra mitad de carga trasera. Esta petición venía de los trabajadores, que criticaban la escasez de vehículos de carga, que obligaban a esperas entre los trabajadores y "turnos de trabajo kafkianos" para poder llevar adelante las labores de recogida de residuos.
Otros de los nuevos contratos en marcha es el de una máquina hidrolimpiadora, la compra de más contenedores y la solicitud para modificar el actual aparcamiento para camiones en la Costa, con el fin de solucionar los problemas que presenta el actual espacio. También se ha hablado de una posible nueva campa, en el futuro, en incluso de algún punto verde para el litoral, aunque estas últimas propuestas parecen más planes a medio plazo.
Desde CCOO consideran positivo el avance de ayer, materializado en contratos que ya están puestos en marcha. No obstante, todas estas mejoras se acaban de sacar a contratación, aproximadamente entre el 13 y el 20 de marzo. Fechas muy recientes que señalan que el Ayuntamiento se puso manos a la obra siempre después del anuncio de huelga.
Desde el sindicato calculan que para que lleguen los camiones, aún deberán pasar unos cuatro o cinco meses como mínimo, por lo que no tendrían una solución inmediata a sus demandas y deberán seguir trabajando en las mismas condiciones unos meses más.
Y es que hay varias denuncias que, hace dos años, se reclamaron ante la Inspección de Trabajo. Tras las visitas, se hizo un requerimiento al Consistorio oriolano para que solucionase los problemas señalados. Estos eran la insalubridad y deficiencias que tienen las instalaciones, las malas condiciones de los vehículos y la falta de equipo de protección individual, tanto en el lugar de trabajo denominado Campa como en Orihuela Costa. Desde marzo de 2018, la plantilla lleva pidiendo la solución de estos problemas al equipo de Gobierno que ya han comenzado a responder.