VALÈNCIA (EP). El Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunitat Valenciana (COOCV) ha pedido este miércoles que la Conselleria de Sanidad incluya a este colectivo profesional en el Marco Estratégico de Atención Primaria y Comunitaria 2022-2023 para contribuir a mejorar la salud visual de la población.
Al respecto, ha lamentado que la consellera de Ana Barceló, "se ha olvidado de nuevo" de estos profesionales en la presentación el pasado viernes de este "ambicioso y positivo" plan, en el que se van a invertir 326 millones y se van a incorporar 1.600 nuevos profesionales a la plantilla estructural.
Y ello, ha lamentado, a pesar de "la deficitaria calidad de la atención en salud visual de los ciudadanos, expuestos a largas listas de espera, provocadas por la saturación de los servicios de oftalmología".
Así, el colegio recalca que "los números demuestran la necesidad" de los ópticos-optometristas, ya que según un reciente estudio realizado en la sanidad pública, el 27,6% de las derivaciones que realizan los pediatras de atención primaria y el 14,6% de las que realizan los médicos de familia, son al oftalmólogo, siendo un 76,4% de ellas por trastornos de la agudeza visual, que podrían ser asumidas y solucionadas por ópticos-optometristas integrados en la Atención Primaria.
En ese sentido, el presidente del Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunitat Valenciana, Andrés Gené, ha destacado el "papel de filtro" que pueden desempeñar ya que su formación universitaria les permite realizar la derivación de enfermedades oculares a oftalmología con "alta precisión y en plazo prudencial de tiempo", además de atender todos los problemas refractivos y binoculares en el primer nivel.
"Una labor necesaria por lo que demandamos a nuestros gestores sanitarios la plena integración, en número suficiente, de ópticos-optometristas en la Atención Primaria", ha reclamado. En ese sentido, recuerda que CCOO se ha sumado a esta petición.
En ese sentido, señala que la salud ocular y la visión tienen "amplias y profundas implicaciones" como el desarrollo sostenible y la economía y sin embargo " muchos individuos y familias siguen sufriendo las consecuencias de un acceso deficiente a una atención visual de calidad y asequible, lo que puede conducir a la pérdida de visión y a la ceguera en los casos más graves".
Así, explicad que muchas deficiencias visuales, tanto las asociadas a la edad como las derivadas del actual modo de vida, pueden ser tratadas en la Sanidad Pública a través de procedimientos optométricos incardinados dentro de las funciones que corresponden a los ópticos-optometristas.
Sin embargo, la carencia estructural de ópticos-optometristas se traduce en "la saturación" de los servicios de oftalmología, ya que los oftalmólogos se ven obligados a atender a pacientes con problemas refractivos y binoculares, retrasando el tratamiento de otros pacientes con patologías y enfermedades de la visión.
"Dadas las peculiaridades de las tareas específicas a desarrollar, el nivel de cualificación requerido y la mejora de la calidad asistencial, está plenamente justificada la inclusión de los ópticos-optometristas en la Atención Primaria", recalca Gené.
Sin embargo, en la Comunitat Valenciana solo 28 ópticos-optometristas ejercen actualmente en centros de salud y hospitales públicos y la experiencia demuestra que la presencia de estos profesionales sanitarios "repercute en una evidente mejora de la atención a la población en salud visual".
Por ello, insiste en que la incorporación del óptico-optometrista en el Marco Estratégico debe ser "prioritaria para ser resolutivos y minimizar la saturación estructural del sistema sanitario a nivel visual". El presidente de la Sociedad de Optometría y Contactología de la Comunitat Valenciana, Rafael Pérez Cambrodi, "esta incorporación no debe verse como un gasto, sino como una inversión que permitirá reducir los costes sanitarios y a la vez ofrecer la atención en salud visual que demanda la población".