ELDA. El Conservatorio de Música Ana María Sánchez ha acogido esta tarde la primera de las cinco mesas de trabajo del Plan Estratégico Elda2030, dedicada al Patrón 4 (Elda verde, accesible, sostenible y eficiente). La mesa ha sido coordinada por el eldense Francisco Martínez, doctor arquitecto y profesor de la Universitat Politècnica de València y profesor de la misma, y ha contado con la participación de Xosé Manuel Tato, director general del Área de Urbanismo y Servicios Generales del Ayuntamiento de Pontevedra; Juan Carlos Sánchez, ingeniero jefe del Ayuntamiento de Benidorm; Emilio Vicedo, presidente del Colegio Territorial de Arquitectos de Alicante, Raimundo Martínez, ingeniero del Ayuntamiento de Elda, y Amelia Navarro, Directora de Sostenibilidad de Hidraqua.
El acto ha contado con la presencia del alcalde de Elda, Rubén Alfaro, y el concejal de Servicios Públicos Sostenibles, José Antonio Amat, miembros de la Corporación Municipal, técnicos del Ayuntamiento de Elda, así como representantes de colectivos y asociaciones, y público en general.
Aniceto Pérez, director del Plan Estratégico Elda2030, y Andrea Paños, coordinadora general del mismo, se han encargado de dar la bienvenido a los ponentes y a los ciudadanos y ciudadanas que han acudido.
Xosé Manuel Tato ha explicado que en el proceso de creación de una ciudad sostenible y accesible, que en el caso de Pontevedra comenzó en 1999, “es fundamental que haya voluntad política por parte de los gobernantes, la coordinación de esfuerzos de todos los actores que intervienen en el espacio público y, por supuesto, la participación social, a través de las asociaciones y colectivos y después directamente a través de la ciudadanía”.
El responsable del Urbanismo de la ciudad gallega ha destacado que “se debe buscar un diseño del espacio público para todos, recuperando a las personas que habían sido expulsadas del mismo por los vehículos. El espacio público debe tener un uso plural en el que la movilidad peatonal sea prioritaria”.
Juan Carlos Sánchez ha dicho que “en una ciudad normal se pueden hacer muchas cosas en cuatro años si hay un compromiso real. Somos una ciudad turística con una población que fluctúa y que por su verticalidad hace que las distancias no sean muy grandes, por lo que más del 70% de los desplazamientos se hacen a pie”.
Emilio Vicedo ha afirmado que “se habla de urbanismo saludable e inclusivo, pero lo más importante es mejorar las vidas de las personas. En el caso de Elda, tiene una escala perfecta y una oportunidad en su casco histórico, con una trama ideal. Las fórmulas de peatonalización van acompañadas del dinamismo del pequeño comercio, mejorando la calidad del espacio urbano y haciéndolo atractivo. Hay que humanizar las ciudades”.
Raimundo Martínez ha afirmado que “hay que dar más protagonismo a los espacios verdes. En cada barrio hay un parque o zona verde, pero para pasar de una zona verde a otra hay que cruzar una jungla urbana. Elda se puede cruzar en 15 o 20 minutos, pero hay que mejorar los espacios de conexión entre zonas o nodos verdes” .
Amelia Navarro ha indicado que “desde Hidraqua marcamos dos líneas de actuación: reducir las pérdidas de agua y la reutilización de las aguas regeneradas. En Elda estamos implantando medidas para garantizar el suministro recurriendo a varias fuentes e implantando en los acuíferos herramientas digitales para mejorar el uso”.
En relación a la creación de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE), Emilio Vicedo ha afirmado que “en Elda la zona más proclive a este tipo de actuación sería el Casco Antiguo, es un escenario de libro en Elda para crear una ZBE, pero también se puede trabajar en el cauce del río”.