MADRID (EFE). Los candidatos a la Presidencia del PP han coincidido este sábado en cuestionar las últimas decisiones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por considerar que suponen el "pago de deudas" con quienes le apoyaron para llegar a La Moncloa.
"Pedro Sánchez, al que le han regalado la Presidencia del Gobierno, empieza ahora a regalar partes de España a todos y cada uno" de los que le apoyaron, ha asegurado la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, antes de participar en un acto con militantes del PP en Alicante.
En su opinión, "tanto el asunto de los presos del País Vasco y de Cataluña como el asunto de TVE" ponen de manifiesto que Sánchez "ha estado dispuesto a todo y ahora se lo van pasando al cobro en espacio corto de tiempo y sin disimular".
Para la candidata, la campaña de su partido y los días venideros son "como un triatlón: primero nadar, después la bici" y, posteriormente, "el maratón" para "sacarle" a Sánchez del Gobierno, "adonde nunca debió llegar".
En apoyo de la exvicepresidenta, han acudido a Alicante, entre otros cargos, el presidente de los populares alicantinos, José Císcar; el alcalde de la ciudad, Luis Barcala; y el exministro de Fomento Íñigo de la Serna.
También la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha considerado que el Gobierno, "que nunca ganó las elecciones, se ha dedicado a pagar facturas a sus aliados, a los que lo han puesto en la Moncloa". Según Cospedal, Sánchez "ha pagado la factura" en forma de "humillación a las víctimas del terrorismo", de acercamiento de "los golpistas" a Cataluña y, ahora, "regalando" RTVE a Podemos "para que la convierta en un aparato de propaganda, de manipulación, de odio y de división entre los españoles al estilo de 'La Tuerka' o de TV3".
Por eso, ha defendido un PP "fuerte, unido y capaz de ganar elecciones", que es lo que Cospedal ha dicho que ha venido a ofrecer a su compañeros de Galicia y del resto de España.
Cospedal ha estado acompañada por el presidente de la Xunta y del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, que también la acompañó ayer en Ourense en otro acto con afiliados.
Por su parte, desde Almería, el vicesecretario general de Comunicación del PP, Pablo Casado, ha lamentado que "en apenas unas semanas" Sánchez "haya dado la cara ya como Zapatero Dios" y haya "dejado claro que como no puede legislar, porque sus aliados son los independentistas, batasunos y podemitas".
Frente a este Gobierno, Casado ha subrayado que espera liderar un partido "en el que quepa todo el mundo, incluso los que no estén en el partido" para volver a ser "esa casa común" con un "proyecto unido, renovado e ilusionante".
La necesidad de reformar el PP ha sido el eje de la intervención del exministro de Exteriores José Manuel García Margallo, quien este sábado ha hecho campaña por Palma de Mallorca, donde se ha definido a si mismo como "'outsider', una especie de Donald Trump pero en demócrata", capaz de sacar adelante la renovación que precisa su partido y España.
En este contexto, Margallo ha insistido en que "encargar" esas trascendentales reformas a Sáenz de Santamaría y a Cospedal "sería tan imaginativo como encargar al papa Borgia una encíclica sobre la castidad" y ha advertido de que "o nosotros regeneramos el centro-derecha o el centro derecha lo regenerarán otros; o hacemos un plan de regeneración de España o lo harán otros".
La importancia de la renovación también ha sido el eje de la intervención en Sevilla del responsable de Relaciones Internacionales del PP, José Ramón García Hernández, quien ha subrayado que su propuesta se distingue de las demás en que "muchos hablan de renovación, pero yo hablo de cómo hacerla".
Así, García Hernández ha asegurado que su intención es "recuperar al afiliado y nuestros principios firmes para hacer políticas modernas" y ha apostado por medidas como "primarias o limitación de mandatos a ocho años en todos los cargos".
Elio Cabanes, candidato a presidir el Partido Popular, ha augurado hoy en Santiago de Compostela "paros y huelgas en el sector del transporte como consecuencia de la subida del gasóleo que ha aplicado el Gobierno de Pedro Sánchez"