ALICANTE. Desde el confinamiento decretado con el estado de alarma de marzo, al estallar la pandemia del coronavirus en España, la demanda latente inmobiliaria ha virado hacia las viviendas con amplias zonas verdes lejos de los centros urbanos, en previsión de que haya que afrontar un nuevo encierro. Y, en la misma línea, se ha incrementado el interés por las condiciones para trabajar desde el domicilio. Una tendencia que han detectado los arquitectos alicantinos, que proponen aprovechar los fondos de reconstrucción europeos y modificar la legislación para favorecer la adaptación de edificios hacia este tipo de vivienda.
El presidente del Colegio de Arquitectos de Alicante, Emilio Vicedo, trasladó esta propuesta al portavoz de Ciudadanos (Cs) en Les Corts, Toni Cantó, en un encuentro organizado por el concejal de Urbanismo de Alicante, Adrián Santos (de la formación naranja) la semana pasada, aprovechando la visita del portavoz autonómico a la Diputación de Alicante. Cantó se reunió con arquitectos e ingenieros para analizar problemáticas del sector y el uso que se puede dar a los fondos europeos para la rehabilitación. Al margen de la eficiencia energética, que suele ser una de las propuestas más repetidas, Vicedo apostó por la adaptación de los edificios a los posibles confinamientos.
En este sentido, según explican fuentes del Colegio de Arquitectos, la propuesta pasa por adaptar edificios ya existentes a esta nueva tendencia, al margen de que los que se construyan desde cero a partir de ahora ya la tengan en cuenta. De ahí el interés por captar fondos europeos para financiar las actuaciones. Vicedo propuso fomentar las zonas comunes abiertas, tanto zonas verdes como de servicios (gimnasios, lavanderías...), aprovechando para ello las cubiertas o los bajos de los edificios donde sea posible.
Asimismo, los arquitectos apuestan por crear zonas de teletrabajo de uso compartido, para facilitar el acceso a esta nueva fórmula al mayor número posible de familias, con independencia de las prestaciones de su vivienda. Así, Vicedo defendió esta propuesta para hogares con varios hijos que se vean obligados a seguir la docencia a distancia, o donde sea preciso seguir teletrabajando aún cuando la vivienda no esté preparada para ello. Estas zonas comunes de teletrabajo vendrían a cubrir esa necesidad y el Colegio de Arquitectos apuesta por aprovechar los fondos europeos para llevar a cabo las actuaciones necesarias.
Al margen de aprovechar los fondos de reconstrucción para adaptar edificios existentes, fuentes conocedoras del encuentro señalan que también se trasladó a Cantó la posibilidad de modificar la Lotup para que se empiece a tener en cuenta de manera firme por la Administración que las cubiertas de los edificios sean zonas verdes y de esparcimiento, que haya espacios para teletrabajar en las casas y en los edificios. Algo que ya está permitido por la norma, por lo que el cambio iría en el sentido de fomentar estos espacios en los edificios que se planteen a partir de ahora.
Otro asunto que se abordó en la reunión fue defender un cambio en la Ley de Arquitectura para evitar que los proyectos se adjudiquen a ofertas con fuertes bajas en el presupuesto de licitación, a costa de la calidad de la ejecución, y por fomentar los concursos de ideas que dignifiquen la profesión con un apoyo firme de la Administración. El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, el valenciano José Luis Ábalos, anunció que preparaba una norma en este sentido el pasado febrero, justo antes del confinamiento, para terminar con las adjudicaciones 'low cost' y primar la alta calidad de los proyectos. En este sentido, la petición a Cantó fue que su formación preste todo su apoyo para avanzar en esta línea.