La mesa redonda sobre robótica y su relación con el mercado, conocimiento y financiación del evento Global ImasT.Son robots antropomorfos, con brazos articulados, suelen tener seis ejes, acaban de llegar prácticamente a la provincia de Alicante y no suponen ningún riesgo para los trabajadores. Así es la robótica colaborativa, uno de los aspectos que se abordaron en la sede de la UMH del evento nacional sobre innovación tecnológica
ELCHE. Los robots colaborativos son una nueva realidad que aumenta la competitividad de las empresas, permite a las fábricas producir más unidades, ser más eficientes y contar con el mismo personal porque la filosofía que hay detrás de estas herramientas tecnológicas no pretende sustituir a los trabajadores por robots sino convivir en un mismo espacio y ser más productivos.
Así lo expuso este miércoles el director técnico de la empresa ilicitana Inda Levante, Borja Coronado, durante el evento Global ImasT, un evento nacional sobre innovación tecnológica que se desarrolló de forma simultánea en 12 sedes nacionales, una de ellas en la Universidad Miguel Hernández de Elche.
Para Coronado, la irrupción de los robots colaborativos en las empresas no supone la eliminación de empleados sino que “una vez que se despeja la primera sensación de los trabajadores, al final se dan cuenta de que el robot hace la tarea más pesada, la que nadie quiere hacer y la gente se reubica en las empresas para hacer otro tipo de cosas”.
El director técnico de Inda Levante, una empresa que distribuye estos robots colaborativos en la Comunitat Valenciana y la región de Murcia, señala que en la provincia de Alicante la robótica colaborativa ha arrancado este año, “el concepto es muy nuevo, llegó a España hace unos 2 ó 3 años y nosotros en Alicante llevamos un año y estamos muy ilusionados porque hay mucho interés y ganas por explorar este campo”.
El trabajo que desempeñan estos robots se puede aplicar a toda aquella acción repetitiva que haga un brazo humano como el paletizado, mecanizado, pulido y atornillado entre otros. A nivel general, el sector que más los está utilizando es el de la automoción aunque en la Comunitat Valenciana se da principalmente en packaging y alimentación.
Frente a la robótica convencional, que según Coronado, “se basa en grandes inversiones, grandes series y ratios de velocidad muy altos”, la robótica colaborativa “es flexibilidad absoluta, cambios de formato, programa y compartir espacio físico entre humanos y robots”.
De momento estos robots están haciendo aplicaciones sencillas pero todo indica que a corto plazo irán evolucionando con sistemas complementarios como visión artificial, sensórica avanzada y serán capaces de hacer tareas más complejas.
Junto a la robótica colaborativa y su papel en el mercado laboral, en el evento Global ImasT también se abordaron otras cuestiones como la formación, iniciativas y emprendimiento en el sector de la robótica así como la financiación de proyectos emprendedores en el sector de la robótica.
La jornada, organizada por eGauss, se celebró en el edificio Quorum I del Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández de Elche y de forma simultánea en más de una decena de sedes que se conectaron vía streaming con la sede central de la Universidad Complutense de Madrid para la apertura, clausura y ponencia principal, realizada por el periodista Iñaki Gabilondo.
Esas intervenciones se intercalaron con mesas redondas que se realizaron de forma física en cada una de las sedes y cada sede abordó una temática diferente relacionada con la innovación tecnológica.
La directora gerente del Parque Científico de la UMH, Tonia Salinas, señaló que en la sede de la UMH se había apostado por el tema de la robótica para estimular iniciativas de emprendedurismo en esa área del conocimiento.
