ALICANTE. La previsible adjudicación del contrato de limpieza de colegios y dependencias municipales a una UTE liderada por una filial de ACS (Clece, en alianza con Fissa) avivó este jueves el debate sobre la externalización de servicios municipales entre los tres socios del tripartito de Alicante. PSOE, Guanyar y Compromís valoraron en diferentes términos el resultado del concurso en el que, finalmente, no ha sido determinante la incorporación de una bonificación (8 puntos adicionales) para el aspirante que se comprometiese a mantener a su plantilla actual (unos 450 trabajadores) al menos durante dos años.
El líder de Compromís, portavoz del tripartito y edil de Contratación, Natxo Bellido, abundó en que al equipo de Gobierno le hubiese gustado que todas las empresas firmasen ese compromiso para ampliar las garantías que ya ofrece el convenio sectorial sobre la obligación de subrogación para asumir a la plantilla a cargo del servicio. Y, en esta línea, insistió en que se iba a solicitar a la previsible adjudicataria que mantuviese esos puestos de trabajo. "Así lo vamos a comunicar también al comité de empresa que nos ha solicitado una reunión al respecto", concluyó.
El alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, señaló que, por lo que conocía, el proceso de licitación había sido escrupuloso y que "las puntuaciones técnicas han sido las que han sido" pese a la modificación del pliego con la que se aspiraba a procurar más garantías sobre la continuidad de los trabajadores. En cualquier caso, volvió a lamentar que se haya perdido "mucho tiempo" para concretar la adjudicación de ese servicio "porque nada más llegar al Gobierno ya sabíamos que no podíamos municipalizarlo", señaló, en referencia a los estudios que se abordaron para explorar esa posibilidad a petición de Guanyar.
Y, por último, el portavoz adjunto de la agrupación electoral y edil de Medio Ambiente, Víctor Domínguez, lamentó que la UTE que se perfila como adjudicataria sea la única que no ha firmado el compromiso del mantenimiento de la actual plantilla y sostuvo que Guanyar "estará vigilante para garantizar que no haya ningún despido y se mantengan las condiciones laborales de los trabajadores".
En este sentido, dijo que se han seguido unos criterios técnicos incuestionables a la hora de valorar la propuesta y decantar la adjudicación. Sin embargo, señaló que, a juicio de su grupo, el resultado de esta licitación vuelve a demostrar que "la única manera de garantizar" la continuidad de los trabajadores que desempeñan una función pública y de conseguir el mantenimiento de las condiciones laborales de esos trabajadores "pasa por la municipalización". Además, apostilló, con esa fórmula se consigue "un importante ahorro", al no tener que asumir los costes que implica el beneficio industrial y el IVA.