VALÈNCIA (EP). La Plataforma de Asociaciones de Productoras Valencianas reclama que se aumente la partida presupuestaria prevista para À Punt en las cuentas de la Generalitat de 2022 y se cumpla así la ley de financiación de la radiotelevisión pública. Advierten que el audiovisual valenciano se encuentra "en riesgo de desaparecer" y que la propuesta económica actual para la cadena "supondría la destrucción de más de 1.000 puestos de trabajo en las empresas del sector y la cancelación de producciones".
Las productoras recalcan --en un comunicado suscrito por Animat, PAV, Avant, Avepa y AAA--, que "lo que está en juego es el crecimiento del audiovisual valenciano como el sector industrial y cultural que ha irrumpido con mayor fuerza en los últimos cuatro años en España o reducirlo a la insignificancia".
La plataforma subraya que el audioviosual es "un sector estratégico para la Comunitat Valenciana", que se ha convertido, además, en estratégico en el ámbito estatal, puesto que "la capacidad productiva y creadora valenciana ha marcado el panorama español en los últimos años". "Nunca se ha producido tanto aquí y desde aquí", aseveran. Por eso, expresan su "confianza plena" en que los presupuestos "reflejarán finalmente esa convicción común".
"Pero esa idea de motor social y cultural es incompatible con el actual borrador de la Ley de Presupuestos de la Generalitat para el próximo año. Por un lado, los 58,6 millones de euros asignados a À Punt que aparecen en ese borrador incumplen la Ley de Creación de la Corporación Valenciana de Medios de Comunicación, al estar por debajo del 0,3% del global. Este hecho condenaría al sector a la desintegración", alertan.
Además, añade el colectivo, "cortaría de raíz la posibilidad de crear productos culturales y de entretenimiento que expliquen quiénes somos y cómo somos, tanto aquí como más allá de nuestras fronteras".
El resultado en la práctica del recorte presupuestario, unido al problema del IVA es que recae íntegramente sobre la producción externa, cuya partida sería "insignificante, atentando contra toda la ya maltrecha industria audiovisual valenciana".
Los productores recuerdan que À Punt "no es solo lo que sale por la pantalla de la televisión, sino que es la pieza angular de todo el cine de ficción, documental y de animación que hacemos desde aquí y que se está consolidando como a un referente en España desde la aparición de À Punt en 2017".
"Múltiples películas financiadas por À Punt que en estos años han tenido recorrido en las taquillas españolas no existirían con esta propuesta de presupuestos. Series de televisión y programas de entretenimiento dejarían de agregar audiencias a la televisión pública, y la pilota valenciana o la Gala de las Artes Escénicas no podrían verse el próximo año. No se verían, no existirían. Esta situación de infrafinanciación haría tambalear, además, todo el sistema audiovisual español" insisten.
En este sentido, aluden a los acuerdos para la reciprocidad y para la producción conjunta entre IB3, TV3 y À Punt que "ahora quedarían en entredicho, ya que la Comunitat Valenciana no podría aportar prácticamente ningún contenido y se convertiría en simple espectadora pasiva de sus contenidos".
Esto afecta también a los acuerdos iniciados con TVE para producir conjuntamente y aumentar los contenidos en valenciano en la televisión española. Y, por último, resumen, "afecta a multitud de coproducciones con otras comunidades autónomas que habían confiado en la solvencia profesional, artística y financiera de la Comunitat Valenciana y que ahora no podrían hacerse realidad".
Las empresas cifran las pérdidas posibles: "más de 1.000 puestos de trabajo en las empresas productoras a los que hay que sumar los de las empresas auxiliares (catering, maquinaria, transportes, hostelería, etc.), y, además, los actores y actrices que dejarían de trabajar; una reducción del 50% de los programas que se producen actualmente para televisión y poner en grave peligro la posibilidad de realizar anualmente, como mínimo, 8 cortometrajes de ficción, 2 de animación, 3 series, 12 largometrajes documentales y 10 largometrajes de ficción".
"Podemos hacer la ceremonia de los Goya aquí un año más, medida que aplaudiríamos, pero ¿qué películas valencianas podremos llevar?, ¿cuáles llevaremos a los Premis Berlanga?, ¿haremos unos premios del audiovisual valenciano que podrían quedar desiertos en gran parte de las categorías? Se nos ha retado y nos hemos retado constantemente a conseguir una fuerza y una identidad propia, como la que tienen el cine gallego, el cine vasco o el catalán. Sin embargo, ese cine existe, de hecho, porque tienen televisiones autonómicas fuertes, imprescindibles para generar proyectos propios y no subsidiarios", argumentan.
"En coherencia con esa idea --prosiguen-- todas las televisiones autonómicas españolas han aumentado sus presupuestos para 2022, además de compensar el IVA derivado del cambio de criterio de la Agencia Tributaria. Por el contrario, en el actual borrador de nuestros presupuestos, aquí reducimos en 2 millones el presupuesto anterior y no compensamos el IVA. Si esto no cambia seríamos la única televisión autonómica del estado que merma".
Estas entidades consideran que los presupuestos de la Generalitat Valenciana deberían aportar a À Punt una cifra superior a los 84 millones de euros --esto sería el mínimo del 0,3% de los presupuestos globales que marca la ley-- y en los siguientes, de forma progresiva, aspirar a alcanzar el 0,6% máximo del presupuesto que marca la ley de creación del ente.
Finalmente, señalan que es tiempo de enmiendas a los presupuestos. "El proceso está abierto, pero no valen parches. Estamos a tiempo de que se haga bien y que logremos un éxito conjunto como sociedad", concluyen.
A lo largo de su mandato, Costa lo apostó todo por la audiencia, pero sin un respaldo presupuestario ni burocrático, no ha habido modelo que asentar sino situaciones que amortiguar