análisis

Las previsiones bajistas del BCE arrastran a las divisas europeas

Informe elaborado por Enrique Díaz-Alvarez, Matthew Ryan y Roman Ziruk

17/12/2024 - 

La reunión del BCE de la semana pasada transcurrió prácticamente según lo previsto, con un recorte de 25 puntos básicos y una importante rebaja de la evaluación de las perspectivas económicas por parte del banco central. Ninguno de los dos acontecimientos sorprendió realmente a los mercados, pero el contraste entre este pesimismo y lo que se espera que sea un «recorte de línea dura» por parte de la Reserva Federal la próxima semana hizo que el dólar fuera la divisa del G10 que mejor se comportó, empatando con la corona noruega. Los resultados fueron más dispares en las divisas de los mercados emergentes, la mayoría de las cuales experimentaron modestos repuntes tras la brutal caída de 2024 que las ha llevado a niveles muy infravalorados.

Esta semana los mercados se centrarán en la última reunión del año de la Reserva Federal (el miércoles) en la que se espera un recorte de 25 puntos básicos; la clave estará en la orientación futura de los tipos implícita en el diagrama de puntos del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC). Pero antes de eso, hoy se publicarán los índices PMI de actividad empresarial en todo el mundo. Estamos deseando ver si los pésimos niveles europeos del mes pasado fueron una reacción instintiva a la victoria electoral de Trump o si indican algún malestar más profundo. El informe del mercado laboral del Reino Unido del martes, al que seguirá el dato de inflación del miércoles y la reunión del Banco de Inglaterra del jueves, completarán las publicaciones importantes de la semana.

Euro

La última reunión del año del BCE concluyó con lo que la mayoría esperaba: un recorte de 25 puntos básicos y una sombría rebaja de sus expectativas de crecimiento para la zona euro en 2025 y 2026, manteniendo prácticamente sin cambios sus previsiones de inflación. Esta evaluación a la baja significa que probablemente habrá un recorte en cada reunión del primer semestre de 2025. El euro se tomó esto con calma y consiguió terminar la semana justo por encima del nivel de 1,05 frente al dólar.

La próxima gran prueba serán los índices PMI de actividad empresarial de diciembre, que se desplomaron en noviembre tras la victoria electoral de Trump, pero que podrían repuntar ahora que se ha disipado el impacto inicial.

Dólar

El informe de inflación de noviembre salió exactamente como se esperaba.  Lo más notable fue que el número mensual se situó en el 0,3% por cuarto mes consecutivo, consistente con una tasa anualizada justo por debajo del 4% que aumentará la inquietud de la Reserva Federal ante la posibilidad de que el progreso en la reducción de la inflación se haya estancado.

Aunque esperamos que la Fed recorte los tipos esta semana, prevemos que la orientación futura se mueva en una dirección de línea dura y tenga dificultades para justificar más de dos recortes adicionales en todo 2025.

Libra

Los malos datos de octubre sobre el crecimiento mensual del PIB y la producción industrial preparan el terreno para la reunión del Banco de Inglaterra de esta semana, que tendrá lugar justo después de que se publiquen los índices PMI y los informes sobre empleo e inflación de noviembre. No es habitual que una decisión del banco central tenga lugar inmediatamente después de tal avalancha de datos económicos, pero no se espera que estos últimos influyan en el Comité de Política Monetaria a la hora de recortar los tipos. Sin embargo, podría influir en el número de disidentes que voten a favor de un recorte.

Pensamos que de cara a 2025, unos tipos altos, un crecimiento relativamente resistente y el continuo acercamiento a la UE permitirán que la libra esterlina siga subiendo tanto frente al dólar como frente al euro.