DÉNIA. Dénia atesora una de los ejemplos de arte rupestre levantino únicos en toda su área de influencia, buena parte de la península. Se trata del abrigo de La Catxupa, un santuario neolítico donde se conservan pinturas elaboradas por los habitantes de la Marina Alta hace 7.000 años. La importancia de La Catxupa no sólo radica en sus representaciones, sino en que es la única cavidad de esta época que está mirando al mar.
Justo enfrente de La Catxupa, en el Montgó está la cueva del Barranc de Migdia, pero cómo todas las de la época miran al sur, por donde les entraba el sol. La Catxupa es un ejemplo prácticamente único. Está cerca del mar y es muy probable que el Mediterráneo bañara las faldas de esta montaña hace 7.000 años. En este abrigo, que no se trata de una cueva, hay una serie de pinturas.
“Era el Neolítico, se buscaban espacios para ubicar santuarios y hacer representaciones con los materiales que tenían”, precisan los arqueólogos consultados. El arte rupestre levantino es único también, se diferencia de otros similares que se realizaban en el norte de España: el cántabro o el astur, por ejemplo, donde hay claras diferencias en cuanto a las formas y el contenido de las obras.
Un detalle de una pintura de hace 7.000 años en La Catxupa.
Otra de las pinturas del yacimiento Neolítico.
La Catxupa no tiene competencia cercana. Es cierto que hay cavidades o abrigos con pinturas muy cerca del mar, pero ninguna con la orientación noreste, es decir, mirando al Mediterráneo: “No era lo habitual y se desconoce porqué crearon ahí un santuario, aunque estar mirando al Montgó, que durante la antigüedad fue considerado un santuario natural es una hipótesis, además del control del valle”. Las pinturas se elaboraban con óxido de rocas, que los hombres y mujeres del Neolítico mezclaban con algún aglutinante para dar consistencia, resina de árboles o clara de huevo, básicamente.
El arte rupestre levantino se adentra hasta el centro de la península ibérica, hay manifestaciones similares en Guadalajara, por citar un ejemplo, y todos miran al sur básicamente. La Catxupa es por tanto un abrigo único en el Mediterráneo. Hay otras cuevas o abrigos cerca del mar como La Joquera en Castelló o Las arañas del Carabassí, en Santa Pola, pero pese a su cercanía al Mediterráneo tampoco miran al litoral, sino al sur.
Vistas al Montgó y al mar desde el abrigo de La Catxupa.
El arte rupestre levantino tiene características propias: representa a cazadores, son de color rojo por el óxido o incluso sangre de algún animal, los cuerpos son alargados, se empiezan a colocar atributos a los personajes, como diademas o pulseras, demostrando así la jerarquía, y finalmente se refleja al hombre como cazador y a la mujer en escenas de domesticación de la agricultura o la ganadería.
En ese momento, la gente del Neolítico estaba intentando dejar de ser nómada, pero cuando agotaban los recursos de una zona se desplazaban a otra. No conocían cómo tratar la tierra para que mantuviera su fertilidad o estaban aprendiendo tratar cereales para que tener este recurso todas las temporadas.
Abrigo de La Catxupa, visto desde la falda de la montaña.
Otra de las características de La Catxupa y del rupestre levantino es que se realizaba en frisos, tramos de roca en abrigos, zonas abiertas adentradas en la montaña pero que no llegan a ser cuevas. Ahí buscaban tramos rectangulares donde representar las escenas de su vida, a modo de fotogramas. La Catxupa se puede visitar en visitas que organiza el Ayuntamiento de Dénia, en ocasiones también las promueve el consistorio de Gata de Gorgos por su cercanía.