Las empresas de la provincia de Alicante tiran de ahorros tras la pandemia para no endeudarse

ALICANTE. Los depósitos bancarios del sector privado se desplomaron en la provincia de Alicante en 2021. Una tendencia que ya se observaba en el mes de junio, como contó este diario, y que se acentuó a medida que avanzaba el ejercicio, como refleja el informe de coyuntura relativo al último trimestre del año presentado este miércoles por el Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca). En diciembre de 2021, familias y empresas alicantinas tenían en el banco 4.671 millones de euros menos que un año antes, lo que supone un 'bocado' de casi el 12%.

En total, al cierre del año, el sector privado de la provincia guardaba en el banco 35.038 millones de euros, un 11,8% menos que en el mismo mes del ejercicio 2020, cuando los ahorros de los alicantinos sumaban 39.710 millones de euros. Una drástica reducción (en España los depósitos aumentaron) que no está relacionada con la situación de la Comunitat Valenciana, sino que es específica de la provincia. De hecho, en el mismo periodo los depósitos en la vecina València aumentaron en 10.000 millones, mientras Alicante se convertía en la provincia de España donde más se redujeron los depósitos.

En cuanto al crédito, siguió un camino similar. Al cierre de 2021 la banca tenía prestados 35.793 millones de euros al sector privado alicantino, cuando un año antes eran 39.105 millones. Un descenso del 8,5%, frente al 0,1% que se registró a nivel nacional. A juicio del director de Estudios de Ineca y autor del informe, Francisco Llopis, esta evaporación de los recursos financieros del sector privado de la provincia "se va a notar este año, porque el colchón financiero con el que salimos de la pandemia se está terminando".

El presidente de Ineca, Nacho Amirola, consideró a preguntas de este diario que Alicante está saliendo de la crisis sanitaria (justo cuando llega la ucraniana) "más lentos que la media porque no tenemos recursos financieros; muchas de las medidas que se han adoptado han consistido en endeudamiento, pero nuestras empresas están huyendo de esa solución". Llopis añade que las empresas siguen tirando de recursos propios en esta travesía para no recurrir al crédito, por "prudencia" y porque la anterior crisis estigmatizó el endeudamiento, con el estallido de la burbuja hipotecaria.