L'ALFÀS DEL PI. El Ayuntamiento de l'Alfàs del Pi ha decidido suspender la evaluación ambiental del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Lo hacen para poder salvar este trámite debido a que tienen dos informes pendientes de su resultado favorable y que sin ellos, sería incompatible obtener una respuesta positiva a la evaluación ambiental, tal y como informó a este diario el concejal de Urbanismo, Toni Such. La decisión se aprobó este viernes por el pleno donde el PSOE tiene mayoría absoluta.
En concreto, uno de estos documentos a los que tendrá que alegar el Consistorio es el emitido por el Servicio de Ordenación del Territorio, referente a la Estrategia Territorial de la Comunidad Valenciana (ETCV).
Éste concluye que el crecimiento para actividades económicas propuesto por el PGOU de l’Alfàs supone un exceso del 53% respecto al índice máximo establecido en la ETCV. Algo que rechaza de lleno el gobierno local, basándose en diferentes incongruencias que recogería el texto bajo su óptica.
Así, defienden que se han incluido terrenos que no deberían computarse como crecimiento para actividades económicas, bien por tratarse de suelo destinado a equipamiento general y espacios libres en el PGOU de 1987 (cementerio municipal), o porque se trata de polígonos industriales urbanizados desde hace décadas, con un grado de consolidación próximo al 80%, y que están en situación de sellado según la cartografía SIOSE del Instituto Cartográfico Valenciano (polígono industrial del cementerio y suelo terciario ‘Ventorrillo’).
Según explicó Such, esto implica entre otras cosas que “se ha computado por error como suelo destinado al crecimiento de actividades económicas una bolsa de 100.000 m² en la que se incluye el cementerio municipal y la reserva de suelo para la ampliación del camposanto, más una zona verde, que constan como equipamiento general y espacios libres en el vigente PGOU de 1987”.
Con todo, el Ayuntamiento asegura que no se pueden incluir para calcular este dato porque no se trata de nueva clasificación de suelo para usos industriales o terciarios y por tratarse de un suelo sellado.
Además, el concejal de Urbanismo señaló que el proyecto tiene un informe favorable condicionado a la financiación. Esto supone elaborar una nueva documentación con previsión de que se termine dentro de varios meses, lo que también obliga a paralizar la evaluación ambiental para ganar tiempo y que cuente con toda la información favorable posible antes de su conclusión.
El PGOU de l’Alfàs proyecta un modelo de municipio respetuoso con los espacios verdes. Se incrementa la superficie del suelo no urbanizable hasta el 56%, cuidando especialmente el Parque Natural de Serra Gelada y su entorno, trazando la recuperación de sendas y caminos, revalorizando a su paso elementos tradicionales como los molinos o la red de riego. Se recoge el suelo urbano ya consolidado y se limita su expansión a través de una importante reducción del suelo urbanizable, que en cifras totales representa tan sólo el 12%, dejando las áreas de mayor valor ambiental al margen del proceso urbanizador, evitando el desarrollo urbanístico desperdigado.
Además, el nuevo PGOU contempla el desarrollo terciario a lo largo de la N-332, creando un bulevar de servicios a lo largo de la nacional, que generará nuevas posibilidades de negocio vinculadas al sector tecnológico, deportivo, comercial y saludable y, al mismo tiempo, unirá el casco urbano con la zona de l’Albir.