Primer paso tras suspender licencias

L'Alfàs del Pi lanza una consulta ciudadana para reordenar los pisos turísticos

22/01/2025 - 

L'ALFÀS DEL PI. El Ayuntamiento de l'Alfàs del Pi es uno de los municipios que ha optado por suspender la concesión de la tramitación de nuevas licencias para viviendas de uso turístico. Lo hace por dos años para la elaboración de una ordenanza que prevé su regularización, concretando zonas y tipología de viviendas en las que se permitirá. Para ello, el Consistorio ha lanzado una consulta ciudadana para conocer la opinión de los vecinos de la localidad. Lo hará por un plazo de diez días hábiles que comenzaron a contar el pasado 16 de enero. 

Se trata del primer paso en el trabajo que está realizando el Consistorio para reordenar esta actividad, según explicó a este diario el concejal de Urbanismo, Toni Such. Esta consulta es previa a la redacción del texto normativo. El objetivo es que participe la ciudadanía así como las organizaciones más representativas y potencialmente afectadas por la norma. Los interesados pueden acceder a ella a través del registro general del Ayuntamiento y desde la sede electrónica municipal.

Tal y como explicó en su día este diario, el pleno aprobó el 30 de agosto de 2024 iniciar los estudios para la redacción de la ordenanza para regular la compatibilidad de viviendas de uso turístico en el municipio. Un trámite necesario para todos los propietarios que quieren ejercer esta actividad de manera legal. Con ello, planteaban que tuviera delimitaciones y condiciones para aquellas zonas que sean "predominantemente de carácter residencial".

En el expediente justificativo, engloban los motivos en tres epígrafes: 'Planeamiento vigente', 'Régimen vigente del uso turístico-hotelero' y 'Problemática detectada en orden a la compatibilidad urbanística para viviendas de uso turístico en el término municipal, y necesidad de nueva regulación'. Sobre el primero, explican la situación en la que se encuentra en la actualidad el PGOU aprobado en 1987. Está en revisión desde 2005, sin embargo, está paralizado en sede autonómica a la espera de la emisión de diferentes informes sectoriales. 

Sobre el segundo epígrafe, informan sobre la situación de la actividad: es compatible con el uso turístico-hotelero pero también con el residencial, en base a la Ley 15/2018, de 7 de junio, de la Generalitat, de turismo, ocio y hospitalidad de la Comunitat Valenciana. En este punto, recogen que la falta de regulación en el PGOU "está conduciendo a la proliferación incontrolada viviendas destinadas en uso turístico en todo el municipio, especialmente en edificios y zonas cuyo uso natural y esencial es y debe ser el residencial". Con todo, traen a colación el nuevo Decreto-Ley 9/2024, de 2 de agosto, del Consell, de modificación de la normativa reguladora de las viviendas de uso turístico. En base a él, razonan que se les permite incluir limitaciones que deberán "obedecer a criterios claros, inequívocos y objetivos, a los que se haya dado debida publicidad con anterioridad a su aplicación".

Problemática

Es entonces cuando el expediente menciona cuál es la "problemática" de la actividad. "Es más que notable y llamativa la proliferación de solicitudes al Ayuntamiento, para destinar viviendas residenciales al uso turístico", continúa el texto. El Consistorio se apoya en las cifras de los últimos años: en 2021 se presentaron 61 peticiones; un año más tarde ascendieron a las 145 solicitudes; mientras que en 2023 fueron de 230. Una cifra que ya se superaba en el momento de plantear el acuerdo plenario en 2024, llegando a las 237 peticiones.  En total, en el registro de la Conselleria de Turisme figuraban 1764 viviendas aproximadamente en l'Alfàs.

Al mismo tiempo, argumentan para tomar esta decisión las "reticencias vecinales", "las quejas recibidas por la falta de inspección, la detección de viviendas turísticas irregulares y las molestias en edificios comunitarios" que "se ha ido acrecentando a lo largo de los años". El Ayuntamiento afronta esta regulación buscando satisfacer la demanda turística y la convivencia residencial en zonas creadas para ello en el PGOU, dicen en la documentación. De lo contrario, alertan de la posibilidad de crear mermas "notables" en la calidad de vida de los residentes o personas que "disfrutan de su tiempo en espacios o edificios residenciales" por ubicarse en sitios "inadecuados que no cuentan con los suficientes servicios para la prestación del uso turístico".

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