La familia Serratosa disuelve Nefinsa, matriz de su extinto 'holding' familiar

VALÈNCIA. La familia Serratosa ha disuelto su histórico holding Nefinsa, sobre el que hace 30 años Emilio Serratosa Ridaura y sus hijos construyeron un importante grupo industrial tras la venta de Valenciana de Cementos en 1992. Nefinsa creó Air Nostrum, la empresa de telefonía Nefitel y la de medio ambiente Terraire, y tuvo una importante participación en Gamesa y el control de Uralita (Coemac).

La disolución, cuyos trámites iniciales publicó este martes el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme), se produce después de varios años esquivando lo que al final no ha podido evitar. 

Sin ir más lejos en octubre de 2016 logró refinanciar 480 millones de sus 550 millones de euros de la deuda financiera total. Lo hizo con el objetivo de restablecer el equilibrio patrimonial de la sociedad Pool de Activos, la filial en la que acumulaba entonces las participaciones en Air Nostrum y Coemac -antigua Uralita-, que eran los principales negocios del grupo.

Un año antes, en agosto de 2015, tal y como avanzó entonces este diario, Emilio Serratosa Ridaura cedió la práctica totalidad accionarial de Nefinsa a sus hijos Javier y Gonzalo, que pasaron a controlar el 98,98% de los derechos de voto. Más de tres años después se completó la salida del patriarca del holding industrial familiar valenciano -para ello tuvieron que reformular el pacto de sindicación de acciones de Coemac-. Los otros tres hermanos, Pablo, Ana y Begoña, habían salido de Nefinsa para poner en marcha el Grupo Zriser (2007), que a finales de 2017 alumbró la primera 'gestora verde' española como también adelantó Valencia Plaza.

Previamente, los Serratosa se salieron de Gamesa -fueron de los primeros accionistas en la entonces una auténtica desconocida- y de Air Nostrum, y acabaron pidiendo concurso de acreedores para la que había sido su 'buque insignia' como era Coemac (antigua Uralita). En mayo de 2020 un juzgado madrileño declaraba la antigua figura de la suspensión de pagos sobre la empresa. 

La compañía controlada por la familia Serratosa se vio obligado a ello ante la imposibilidad de generar la suficiente liquidez para hacer frente a las reclamaciones derivadas de la fabricación de fibrocemento con amianto, una actividad en la que el grupo cesó hace casi veinte años, tal y como contó entonces este diario.

Finalmente el 25 de marzo del año pasado, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) excluía oficialmente las acciones de Corporación Empresarial de Materiales de Construcción (Coemac). Habían pasado nueve años desde que los Serratosa se echaran en manos del gigante KKR -uno de los 'fondos buitres' por antonomasia-, lo que fue el inicio del final de la antigua Uralita.

Nefinsa se fundó oficialmente en mayo de 1974, pero fue en 1993 cuando 'nació' el grupo financiero familiar tras la venta en el verano de 1922 de la que fue la mayor operación corporativa europea hasta entonces: la de Valenciana de Cementos -de la familia Serratosa- a los mexicanos de Cemex, por 125.000 millones de las antiguas pesetas (751 millones de euros).