VALÈNCIA (EFE). El juicio al expresident valenciano Francisco Camps por una rama del caso Gürtel se reanuda esta semana con la declaración de la decena de acusados que han llegado a un acuerdo con la Fiscalía, entre ellos el empresario de la trama Álvaro Pérez, El Bigotes, cuyo testimonio se antoja clave al haber sido señalado como la persona que mantenía el contacto con el exlíder popular.
La Audiencia Nacional reanuda este lunes la vista, tres semanas después de que el considerado líder de la red, Francisco Correa, indicase que fue Camps quien introdujo a El Bigotes a otros miembros del PP y de la administración valenciana tras iniciar "una buena relación con él".
Una declaración que causó mucho malestar al expresident de la Generalitat valenciana, hasta tal punto que, al término del juicio y aún dentro de la Audiencia, llegó a encararse con Correa, a quien acusó de mentir en un enfrentamiento en el que, según ha hecho constar el empresario en un escrito, le insultó con términos como "hijo de puta". Camps niega haber tenido una relación personal con El Bigotes.
El considerado segundo hombre de la trama Gürtel, Pablo Crespo, que confirmó la versión de Correa ante el tribunal, será el que abra la jornada de este lunes al no haber terminado su declaración, y tras él llegará Álvaro Pérez, El Bigotes. Los tres, que cumplen largas condenas por otras piezas del caso, han llegado a un acuerdo con la Fiscalía.
La versión de El Bigotes se antoja clave en este juicio, dado que él era, en palabras de Pablo Crespo, "la persona que dirigía la compañía en Valencia". Además, son conocidas conversaciones entre él y el expresident de la Generalitat valenciana, que obran en la causa, como una en la que Camps se refiere a él como "amiguito del alma" y donde le decía "te quiero un huevo".
Cuando declaró como testigo en otro juicio de Gürtel, en junio de 2020, el exlíder del PP valenciano fue preguntado una vez más por esa conversación. "Era Nochebuena y me salió eso", dijo.
Tras la declaración de El Bigotes, el tribunal irá llamando a declarar al resto de acusados que han reconocido los hechos de los que se les acusa en virtud de un acuerdo con Fiscalía y con el objetivo de ver reducidas sus peticiones de condena. Entre ellos se encuentra algún ex alto cargo de la Generalitat con Camps.
El expresidente autonómico, que se enfrenta en este juicio a una petición de dos años y medio de prisión por fraude y prevaricación, siempre ha recelado de estos acuerdos y ha acusado a la Fiscalía Anticorrupción de promover pactos "obscenos" o "clandestinos", reproches que le valieron una dura respuesta de la fiscal durante el juicio.
Camps está acusado junto a una veintena de personas por la adjudicación presuntamente irregular a una empresa de la trama del montaje de un expositor en la feria de Fitur, de 2009 por 366.529 euros. Además de la pena de prisión, la Fiscalía pide para él 10 años de inhabilitación.
'El Bigotes', en una de sus declaraciones en juicio. Foto: EFE 
