la compañía, que desarrolla 'hardware' y 'software', invertirá un millón de euros

La tecnológica Orbotix abrirá una fábrica de drones de defensa en Valencia

27/05/2024 - 

VALÈNCIA. La compañía de drones de defensa Orbotix abrirá una fábrica en Valencia. Así lo explican dos de sus socios, Bogdan Ochiană y Gregory Letare, quienes apuntan a un centro de ensamblaje en el que esperan invertir hasta un millón de euros. "Queremos producir entre 200 y 500 drones al mes, pero el plan es llegar a los 5.000", apunta Ochianătambién cofundador de la empresa rumana de desarrollo de software Principal 33, con su única sede fuera del país en València. Un espacio que esperan que esté operativo en el mes de junio.

La tecnológica se puso en marcha hace dos años, cuando Ochiană confió en Ignacio Santiago, managing director en València y CEO de la empresa, para delegar Principal 33. Tras los buenos resultados en València, decidió lanzarse con un nuevo proyecto con un "impacto más grande a nivel europeo y mundial". Para ello, se alió con Letare, con experiencia en el ejército suizo y donde vieron posibilidades para adentrarse en el mundo de los drones de defensa. 

"He tenido experiencia en el ejército en Suiza y he colaborado con equipos de seguridad en general, y con fuerzas especiales en España y aprendí con ellos los problemas a los que se están enfrentando", explica. "Queremos encontrar ese producto o solución que puede salvar la vida del soldado operador que está en el frente, porque mientras salvamos su vida también salvamos la de las personas que protege", señala.

La decisión de fabricar drones parte del uso que se da desde hace años en el conflicto aéreo. "Buscamos crear un dron que no supusiera los 100.000 dólares que ahora hay en el mercado, sino que fuera efectivo a nivel de costes y pudiera dar una solución 360 en el campo de batalla", apuntan. Una industria que en su mayoría se desarrolla en Estados Unidos y China, mientras que en Europa se está todavía empezando. "El objetivo final es el de tener casi todos los componentes Europa", explica Ochianăquien asegura que ahora no es posible, ya que la mayoría vienen de Corea o China. 

En busca de una industria europea del dron

"Si empezamos con Orbotix, luego podremos crear junto a otras empresas un ecosistema. Queremos contribuir a una autonomía estratégica de Europa", señala. A día de hoy han desarrollado un dron de reconocimiento y de ataque ofensivo a nivel de hardware, además de un sistema de software con inteligencia artificial para detectar todos los objetivos, categorizarlos y estar seguros de no atacar a algo que no es parte del conflicto, como un coche o una ambulancia", apunta. "Esta información es automática y se envía al operador, que puede cambiarlo. Pero tenemos una probabilidad de más del 95% de que será correcto".

La compañía nace en un contexto en el que los socios consideran que la industria de los drones está muy centralizada en China, y ante una situación de amenaza consideran crucial poder disponer de éstos. "Queremos ayudar a la industria y al ejército europeo a crear las herramientas que generen una buena defensa", apunta Letare. 

Los fundadores señalan que su sistema se encuentra dentro de los estándares de inteligencia artificial europeo y que al ser un sector sensible, la ingeniería está circunscrita en el uso humano basado en la moral. "Queremos discernir dentro de qué es una amenaza para la vida del soldado y qué no lo es. Entendemos el peso mental de tomar decisiones para el soldado. Y el sistema autónomo de reconocimiento y adquisición busca responder de forma más rápida, sin exponerse a ubicar con sus ojos qué es y no una amenaza, y protegerse a él y a los civiles", señala Ochiană.

50 empleados en 2024

La compañía está en conversaciones con gobiernos europeos para impulsar infraestructura de creación de drones. "Si hay un conflicto con grandes países, tenemos un gran problema en Europa, porque el 90% de la producción de drones del mundo se hace en China", recalca Letare. Para ello, han decidido contar con ingenieros valencianos. A día de hoy, son 30 personas en la tecnológica, de los que 14 se encuentran en España,  entre ingenieros, gestión y marketing. No obstante, en sus planes está crecer hasta 50 este año.

Respecto a la inversión para avanzar con el proyecto, señalan  una inversión propia de los fundadores, pero no descartan la entrada de un venture capital, pero están dispuestos a invertir hasta cinco millones. En sus planes futuros, buscan desarrollar un ecosistema donde está todo interconectado. "Nuestro objetivo a futuro es crear lo que podríamos llamar el soldado 2.0, un profesional preparado y capacitado con el equipo correcto", destaca. Para ello, tienen en previsión crear un nanodron pensado para combates de primer encuentro y otro dron de transporte que desplegaría al resto de drones.