ALICANTE. Los colectivos integrantes en la Plataforma por un Puerto Sostenible han expresado este miércoles su "indignación ante la expresión utilizada por la consellera de Transición Ecológica", Mireia Mollà, "al referirse a la contaminación provocada por la carga y descarga de graneles pulverulentos al aire libre como 'molestias' denunciadas por los vecinos". "Es una expresión burda para minimizar los graves problemas de salud que provocan las emisiones difusas de compuestos químicos tóxicos, como son las afecciones oculares, respiratorias o cardiovasculares, a los ciudadanos y ciudadanas de los barrios del entorno portuario", aseguran sus representantes, a través de un comunicado.
Además, el colectivo añade que "no ha tenido la consideración, tampoco el presidente de la Autoridad Portuaria, de convocar a esta Plataforma para conocer la instalación y poder confiar, así, en que se va a solucionar el problema crónico de contaminación del aire que tantos años hemos venido sufriendo, y que afecta nuestra salud y el medio ambiente de la ciudad. Recordamos que esta nave cerrada es hoy una realidad por la presión y lucha ciudadana ante las administraciones, en la calle y en los tribunales desde hace más de 15 años".
La asociación añade que "es muy preocupante que ni la consellera ni el presidente de la APA hayan aclarado a la ciudadanía si en los muelles 11 y 13 se va a continuar manipulando graneles pulverulentos al aire libre, cuando no tienen autorización de la Generalitat para ello, como ambos saben perfectamente. El compromiso de la Conselleria con esta Plataforma fue que, si en los muelles 11 y 13 las empresas concesionadas quieren seguir con esta actividad, deben presentar un proyecto de nave cerrada al igual que se ha hecho en el 17".
Así, añaden que "valoramos escandaloso que se vaya a permitir el almacenamiento y la manipulación de graneles pulverulentos al aire libre una vez se ponga en marcha la nave del muelle 17". En este sentido, según el comunicado, la Plataforma ha iniciado un contencioso administrativo en el TSJ para obligar a la conselleria a responder sobre esta cuestión.
"Y más preocupantes son las declaraciones del presidente de la APA y de la propia consellera respecto a que habrá determinadas sustancias, como la biomasa, escorias y otras no detalladas, que continuarán siendo manipuladas al aire libre, porque interpretan que producen una 'afección menor'. No podemos estar en mayor desacuerdo, ya que si estas sustancias son graneles sólidos, están incluidas en el Anexo IV de la Ley de Calidad del Aire y por tanto son potencialmente contaminadoras de la atmósfera, por lo que deben ser también manipuladas en nave cerrada".
A juicio de la plataforma, "no es admisible que se permita esta vía de escape para que las empresas graneleras continúen contaminando impunemente el aire de la ciudad. Recordamos que la Resolución de Autorización de la Dirección General de Calidad Ambiental, que aceptó nuestras alegaciones, en su apartado 11 indica que 'las operaciones de almacenamiento y manipulación de material pulverulentos deberán realizarse en nave cerrada, debiendo restringirse las actividades que se realicen al aire libre al trasiego de materiales no pulverulentos sin riesgo para las personas o el medio ambiente'".
De igual modo, el colectivo recalca que "también se especifica que en el interior de la nave no se podrá trabajar con materiales considerados peligrosos. Por tanto, rechazamos rotundamente la afirmación de la consellera de que ciertas operativas de graneles sólidos 'tendrán un impacto menor y se podrá hacer fuera'. Son unas declaraciones erróneas y totalmente desafortunadas, que nos producen una honda decepción y la nefasta impresión que la contaminación por emisiones a la atmósfera va a continuar".
Al tiempo, la plataforma "rechaza la propuesta de la APA y de la empresa Eiffage de mantener una parte de la operativa a cielo descubierto junto a la nave. Exigimos a la consellera que las estaciones de medición de la calidad del aire estén bajo la supervisión de la administración pública y no bajo el control y propiedad de la empresa promotora de la actividad granelera ni de la APA. Es inaceptable que en el entorno portuario las estaciones de control de la calidad del aire no sean de titularidad pública".
Por otro lado, recalcan que "teniendo en cuenta que la APA practica la opacidad en cuanto al acceso público a la información ambiental sobre los materiales y sus características de toxicidad y peligrosidad que se manipulan en este Puerto urbano, la conselleria debería garantizar el control y la aplicación de la ley mediante un servicio de inspección pública, independiente de la APA y de las empresas y con la suficiente plantilla de inspectores". Por último, el colectivo asegura que "seguimos esperando respuesta a la solicitud de reunión tanto con la consellera como con el presidente de la APA, para tratar este tema y otros que afectan al medio ambiente y a la seguridad de la ciudad".
