los socios cierran la promotora tras enterrar la ate de ikea

La liquidación de Urbanika sorprende a la Sareb: terrenos por 230 millones y una deuda de 500

9/06/2021 - 

ALICANTE. La liquidación de la promotora inmobiliaria alicantina Urbanika, decidida por sus socios el pasado mes de mayo ante la constatación de que los sucesivos proyectos impulsados en el entorno de Rabassa en la capital alicantina estaban definitivamente enterrados, ha sorprendido a su principal acreedor, que no es otro que la Sareb. El 'banco malo' asumió los créditos que las distintas entidades financieras habían concedido en su día a Urbanika, cuando parecía factible sacar adelante el conocido como Plan Rabassa, y la deuda a corto plazo se calculaba, en julio de 2020, en nada menos que 500 millones de euros.

La deuda de Urbanika no es solo con la Sareb, pero el 'banco malo' sí es el principal acreedor de la sociedad, que esta semana ha abierto un proceso de liquidación ordenada, como desveló este martes Alicante Plaza. Según el último balance de la sociedad, aprobado como se decía el pasado mes de julio, Urbanika adeuda 517 millones de euros a corto plazo, de los que 480 (contando intereses) eran con la Sareb. Hasta hace poco, los administradores de la sociedad, participada por Actual Inversiones 2014, dueña del 51%, el Grupo Cívica (en torno al 30%) y el Grupo Villar Mir (el 20% restante), han estado negociando con los acreedores financieros en busca de aligerar la carga financiera de la sociedad, una estrategia que ha cambiado radicalmente ahora.

"La junta general de socios aprobó la disolución voluntaria de la sociedad, considerando que se trata de la mejor opción para sus empleados, acreedores y deudores", explicaban este martes fuentes de la empresa a preguntas de este diario. En el balance de Urbanika figuran también terrenos, solares y promociones en curso valorados, en el epígrafe de "existencias", en un total de 231 millones de euros. Muchos de esos terrenos, de hecho, están concedidos en garantía hipotecaria al 'banco malo', así como la pignoración de las participaciones de su sociedad dependiente Cerámica La Florida. Tras un acuerdo de stand still que venció en 2019, Urbanika seguía negociando desde el año pasado con la Sareb para cancelar la deuda pendiente, según la memoria.

Como ha contado este diario, los socios de la promotora alicantina, anteriormente conocida como Deproinmed y que durante las dos últimas décadas ha intentado sin éxito promover una urbanización de viviendas (conocida como Plan Rabassa) y una zona comercial para Ikea (bajo la fórmula de la Actuación Territorial Estratégica) han decidido disolver la sociedad con un proceso de liquidación ordenada de la firma. Decidida la extinción de la sociedad, sus accionistas han designado una comisión liquidadora, de la que forman parte Actual Inversiones 2014, Gestizor SL y Predios Urbanos SA, con esta última sociedad como presidenta. Miguel Carratalá ocupará el cargo de secretario de la comisión.

Adiós al Plan Rabassa y a Ikea

Durante los últimos ejercicios, Urbanika ha tratado de impulsar la tramitación de distintos programas urbanísticos en los sectores donde es titular de bienes inmuebles, "todo ello sin éxito, bien por motivos técnicos, bien por la falta de financiación externa para impulsar el desarrollo de dichos programas", según la empresa. "En atención a dichas circunstancias, y a la incertidumbre económica causada por el covid-19, la junta general de socios aprobó la disolución voluntaria de la sociedad, considerando que se trata de la mejor opción para sus empleados, acreedores y deudores [...] sin que sea posible determinar, en el momento actual, la duración del periodo de liquidación".

Como se recordará, la ATE de Ikea que impulsaba Urbanika, para favorecer el aterrizaje de la multinacional sueca en el entorno de la autovía, se enterró definitivamente en el otoño de 2016, después de que el Consell le diese carpetazo al desistir Alicante Avanza (filial de Urbanika) de aplicar las correcciones al proyecto demandadas desde el área de Medio Ambiente. Antes, en 2013, la antigua Deproinmed ya había visto cómo la justicia le tumbaba el Plan Rabassa, que preveía construir hasta 13.000 viviendas en la zona, cuando ya contaba con el visto bueno del Ayuntamiento y del Consell.

Del capital de Urbanika han formado parte en los últimos años otras empresas alicantinas, como CHM, que tuvo en torno al 5%, y varios bancos, incluidos Bankia y CaixaBank (ahora fusionados), además de una participada de la extinta CAM. No obstante, la banca salió en 2015 en una operación de reducción de capital que incluía también condonación de parte de la deuda. En estos momentos, la práctica totalidad de la deuda de la promotora es con el 'banco malo'. La firma posee parcelas en otras zonas de la ciudad y de la provincia, pero su principal bolsa de suelo, con la que responde de la citada deuda, está en la zona de Rabassa.

Noticias relacionadas

next
x