ALICANTE (EFE). La incertidumbre que genera la evolución de la pandemia del coronavirus va a retrasar "hasta última hora" el gasto habitual ante la vuelta al cole de las familias, que tendrán que decidir si invertir en libros, material escolar y uniformes, o en ordenadores, tabletas o una buena conexión a internet.
Así lo han considerado, en declaraciones a Efe, tanto desde la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu) como desde la Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana (OCU), que han advertido que el gasto puede ser mayor si es en material tecnológico y por la premura de no poder comparar precios.
El presidente de Avacu, Fernando Móner, ha destacado el "momento complicado y lleno de incertidumbre" y ha afirmado que el gasto habitual "se hará o no dependiendo de si la actividad escolar es presencial o a través de sistemas telemáticos".
"Compramos un libro o una programa informático es una duda que les surge a los padres y que va a depender de la evolución de la covid-19, igual que no es lo mismo desde el punto de vista de la inversión en mochilas, libretas o uniformes ir a clase que no", ha añadido.
Móner ha resaltado que a los padres también les surge la duda de si los colegios concertados y privados les van a cobrar "cuotas adicionales por los gastos extra que han tenido en geles, mascarillas o mamparas" o si tienen que invertir en una mejor conexión de internet en casa "para dar servicio a toda la familia".
"No es lo mismo que se corte la conexión si estás viendo una película que si estás haciendo un examen", ha precisado y ha agregado que también aumentará el gasto en gel y mascarilla, protección de ojos o desinfección de uniformes si la enseñanza es presencial.
"Son dudas que se generan y que harán que las familias se esperen al último momento para ver cómo reaccionar según lo que vaya ocurriendo y no vamos a saberlo hasta pocos días antes de que comience la actividad escolar", ha sostenido.
Para Móner, es "una situación complicada y desconocida, que va a tener a los padres en vilo y a frenar ese gasto por la incertidumbre" y ha subrayado: "el bolsillo de muchas familias ya ha sufrido por la pandemia y la poca disponibilidad la tienen que invertir en lo imprescindible para la educación de los hijos".
"Si compro libros me voy a gastar entre 100 y 300 euros, según la etapa educativa, pero si al final tengo que comprar un ordenador o contratar una conexión a internet de mayor capacidad, el gasto va a ser mucho mayor. Lo que está claro es que hay que dirigir el dinero donde sea más necesario", ha finalizado.
El secretario de la OCU en la Comunitat Valenciana, Vicente Inglada, ha manifestado a Efe que aún tienen en marcha la encuesta de previsión de gasto pero han advertido que la "incertidumbre" es lo que está marcando la compra de material de la vuelta al cole.
Según ha afirmado, las noticias sobre los rebotes "generan inseguridad y dudas en los padres y las familias prefieren esperar a hacer este desembolso económico cuando la seguridad que se les ofrezca de que el curso va a empezar sea mucho mayor".
"Para qué gastar en material escolar, libros y ropa cuando no se está al cien por cien seguro de que no habrá otro confinamiento o que puedan empezar las clases", ha cuestionado y ha añadido que los padres "prefieren anteponer la seguridad a buscar un precio más barato que el que pueden encontrar en dos o tres semanas".
De hecho, ha asegurado que esto va a suponer un "problema" desde el punto de vista del consumidor, ya que si se planifica "da tiempo a comparar precios y comprar más barato pero la gente irá en el último momento y comprará lo que haya a un precio que será más elevado".
Aunque todavía no tiene el gasto medio previsto para la próxima vuelta al cole, ha dicho que probablemente se gaste sobre un 40 o 50 % menos que el año pasado, "porque van a comprar lo justo y sin saber si el material que compren podrá tener el uso que corresponde".
Además, ha destacado que algunas familias preferirán "gastar el dinero en medios digitales para sus hijos que en material o ropa que igual no pueden usar" y evitar así la brecha digital advertida en el confinamiento, especialmente en familias más vulnerables.
"Ante la situación de incertidumbre por la pandemia nos hemos vuelto excesivamente conservadores a la hora de hacer el desembolso económico para la vuelta al cole", ha concluido.