ALICANTE. El proyecto de reurbanización de la tercera fase de La Explanada, en su intersección con la avenida de La Rambla, tendrá que seguir esperando. La propuesta promovida por el equipo de gobierno, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), a través de la Concejalía de Urbanismo, requiere de la emisión de los informes de los departamentos de Tráfico y Limpieza que resultan preceptivos antes de que pueda quedar aprobada en Junta Local. De hecho, ese ha sido el motivo que ha evitado que el proyecto no quedase incluido en la sesión del órgano de gestión política celebrada este mismo martes, según han confirmado el portavoz y el portavoz adjunto del bipartito, Antonio Manresa y Manuel Villar, en su comparecencia semanal para dar cuenta de los acuerdos alcanzados en ese foro.
En principio, todo parece indicar que la aprobación del proyecto podría demorarse algunas semanas para que pueda cerrarse el expediente con la incorporación de esos dos dictámenes, en los que se debe avalar que la reordenación prevista cumple todos los requisitos para garantizar la movilidad peatonal y una disposición adecuada de la circulación. Y también, que no supone ningún impedimento para el desarrollo de los servicios de limpieza viaria y recogida de residuos en el ámbito afectado.
La intervención planificada comprende la eliminación definitiva del paso de los autobuses en el denominado fondo de saco, que ya se ha ejecutado de facto con el inicio de las obras de peatonalización del eje Constitución-Bailén, para configurar una nueva plaza polivalente que dará continuidad al paseo peatonal de La Explanada y que incluirá un surtidor emergente, provisto de sistema de iluminación ornamental, entre otros elementos, después de que se haya descartado la posibilidad de instalar una estructura elíptica construida en acero pulido como hito arquitectónico singular para coronar ese espacio. Además, esa peatonalización se extiende al menos hasta la calle Bilbao que hasta ahora se venía utilizando como punto de giro de los autobuses urbanos.
El conjunto de la actuación conlleva una reorganización del entorno con un coste de ejecución que podría alcanzar los tres millones, en el momento en el que se lance la convocatoria del concurso para adjudicar sus obras, según fuentes consultadas. Su financiación correría a cargo de las aportaciones de fondos europeos asignados para la consecución de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) planteada por el equipo de gobierno en dos anillos circunscritos entre el Centro Tradicional y el eje de la Gran Vía, aunque se había barajado su financiación con cargo al remanente del presupuesto o al préstamo de 20 millones al que el bipartito prevé recurrir para abordar inversiones adicionales a los proyectos por valor de 37 millones ya incluidos en los presupuestos de 2022.
EL PROYECTO PREVÉ UNA REORDENACIÓN DEL ENTORNO DEL DENOMINADO FONDO DE SACO DE LA RAMBLA CON ACTUACIONES POR MÁS DE 3 MILLONES
Por su parte, el grupo municipal de Compromís ha reaccionado frente a la retirada del proyecto de la Junta de Gobierno para solicitar "coordinación entre las áreas de Urbanismo y Tráfico y que no se vuelva a retrasar proyectos como la tercera fase de la Explanada que, incomprensiblemente, se había llevado a Junta de Gobierno sin tener todos los informes pertinentes". "Empieza ser preocupante", ha comentado el portavoz municipal, Natxo Bellido, "que sea cada vez más frecuente la descoordinación entre el concejal de Urbanismo, que no para de anunciar proyectos que después no se traducen en realidades, y el resto de áreas municipales. Y no resulta lógico que se tengan que retirar proyectos de Junta de Gobierno, como ya ha pasado más de una vez por las discrepancias entre las concejalías de Urbanismo y Tráfico".
Por ello, Compromís insta al alcalde "a poner orden en su equipo de gobierno y evitar que se sigan produciendo nuevos retrasos en las pocas inversiones que son capaces de sacar adelante, si las pocas inversiones que salen son paralizadas por los líos internos del bipartito, la ciudad se ve sumida en una parálisis inaceptable a causa de la incapacidad del equipo de gobierno de derechas de gestionar correctamente el Ayuntamiento", ha concluido.