ALICANTE. La Diputación de Alicante se mira en el espejo de Málaga para evaluar la experiencia en la gestión de su Palacio de Congresos y, así, dimensionar las necesidades y funcionalidades a incorporar en los proyectos de los centros de convenciones comprometidos en Alicante y Elche. Sin ir más lejos, el diputado de Infraestructuras, Javier Gutiérrez (Ciudadanos), tiene previsto mantener este viernes un encuentro institucional con el director de Instalaciones y Nuevas Tecnologías del Palacio de Congresos FYCMA, Manuel Aguirre, con el fin de conocer de primera mano la estructura y la versatilidad del complejo.
Fuentes de la institución provincial consultadas indicaron que no se trata de replicar el modelo de la instalación malacitana en los futuros edificios de Alicante y Elche, pero sí de aprender de su trayectoria para trasladarla a ambos proyectos, toda vez que las provincias de Málaga y de Alicante guardan analogías evidentes por lo que respecta a volumen de población y al peso del sector servicios como una de sus principales actividades económicas.
Ese aprendizaje se trasladará, después, al futuro diputado de Arquitectura, el popular José Ramón González de Zárate, en quien se pretende confiar el impulso de la construcción de los dos centros de convenciones, bajo la coordinación de las áreas de Presidencia y de Infraestructuras (sobre todo, por lo que respecta a los costes de ejecución). Según las mismas fuentes, De Zárate no participará en la visita puesto que todavía no ha asumido oficialmente sus competencias (lo hará durante la celebración del próximo pleno de la corporación provincial).
¿Qué particularidades presenta el Palacio de Congresos de Málaga? En primer término, se trata de una instalación situada en las afueras del término municipal de la capital diseñada para la celebración de ferias y congresos. De algún modo, sigue un modelo hasta cierto punto equiparable a IFA por ubicación y por quedar abierto al desarrollo de certámenes que requieran de grandes espacios expositivos. De hecho, en sus 60.000 metros cuadrados de superficie cuenta con dos grandes pabellones, además de dos auditorios, una sala de exposiciones, quince salas multiusos, tres zonas de restauración y un área de aparcamiento con capacidad para 1.200 vehículos. Así, puede acoger eventos de entre 10.000 y 20.000 asistentes.
El edificio, diseñado por el arquitecto Ángel Asenjo, se inauguró en 2003 con la vocación de convertirse en un elemento icónico de la modernidad de Málaga, con una estructura inspirada en el Mar Mediterráneo, y recae bajo la gestión del Ayuntamiento de Málaga a través de la entidad de titularidad municipal Promálaga. Su coste de construcción superó los 55 millones: es decir, un presupuesto próximo a las cifras que se han dado a conocer hasta ahora como inversión estimada para el centro de congresos de la ciudad de Alicante (entre 45 y 50 millones).
¿En qué estado de tramitación se encuentra ahora ese proyecto y el de su proyecto gemelo en Elche? El impulso de los dos centros de convenciones sigue pendiente de la firma de los respectivos convenios de colaboración con los ayuntamientos de las dos ciudades. Cuando menos, en el caso del proyecto de la capital, ya se habría planteado una propuesta con la que se daría paso a la constitución del futuro consorcio encargado de su promoción, según concretó el alcalde de Alicante, Luis Barcala (PP), la semana pasada.
Mientras, la Autoridad Portuaria de Alicante ya habría iniciado el expediente de modificación del Plan Especial del Puerto, así como de la Delimitación de Usos y Espacios Portuarios (DEUP), que resultan necesarias para que el edificio pueda tener encaje entre los muelles 7 y 9. En el caso de la instalación comprometida en Elche, se continúa sin despejar la ubicación definitiva en la que podría encuadrarse. Sea como fuere, la pretensión de la institución provincial sigue siendo, en la medida de lo posible, la de impulsar los dos complejos de manera simultánea.
Al margen de ello, la visita de Gutiérrez a Málaga incluirá el desarrollo de un segundo encuentro institucional con el vicepresidente primero y titular del Área Desarrollo Económico y Social, Juan Carlos Maldonado, y con otros diputados de la corporación malagueña, con el objetivo de compartir información sobre los planes de obra impulsados por las dos administraciones. Se da la circunstancia de que la Diputación de Málaga está gestionada por un bipartito con la misma composición que el gobierno de la Diputación de Alicante: Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs).