ALICANTE. La Diputación deAlicante pondrá en marcha un Plan de Mejoras de Infraestructuras Hidráulicas dotado con 10 millones de euros anuales con el objetivo de atender las necesidades más urgentes en materia de riego y abastecimiento de la provincia. Así lo ha anunciado este jueves durante la reunión de la Mesa del Agua el presidente de la institución, César Sánchez, quien ha añadido,además, que se solicitará a la Generalitat Valenciana que participe en este proyecto y asuma el 50% del coste económico del mismo.
Así, el dirigente provincial ha anunciado que hoy mismo remitirá una carta al president Ximo Puig para solicitarle una reunión urgente con el fin de abordar el denominado Plan Alicante MIHRA, así como la difícil situación hídrica que atraviesa la provincia como consecuencia de la sequía, la peor de la historia reciente y que obliga a las administraciones públicas, tal y como ha destacado el presidente, a colaborar y trabajar juntos.
“La mejor forma de dar respuesta a los problemas es poniendo encima de la mesa soluciones y en la Diputación de Alicante vamos a estar al lado de los regantes y de los sectores productivos, no solo con apoyo político, sino también con inversiones. Es momento de estar unidos,ir juntos y afrontar con compromiso e inversiones el peor momento de sequía al que nos enfrentamos en nuestra historia reciente”, ha indicado el Presidente, quien se ha mostrado confiado en que“Puig va a acoger esta petición de los regantes y de la provincia de Alicante, porque es un tema que nos preocupa a todos y por ello, no tengo dudas, de que apostará por trabajar de manera conjunta en este tema con la Diputación”.
El Plan, de carácter plurianual, se financiará a través de inversiones financieramente sostenibles y contemplará,entre otras actuaciones, nuevas captaciones, modernización de regadío,depósitos y balsas de regulación, renovación de conducciones, nuevas redes de distribución, mejora de la calidad de las aguas “y todo aquello que contribuya a mejorar la eficiencia, la gestión y el uso del recurso tanto en riego como en abastecimiento”, ha detallado el presidente.
Por otra parte, otra de las medidas que se van a poner en marcha a corto plazo para intentar hacer frente a los efectos de la sequía es la consignación de una partida económica de más de un millón de euros en los presupuestos de 2018 con el objetivo de “atender todas las solicitudes presentadas por las Comunidades de Regantes para mejorar las eficiencia de las infraestructuras de regadío que no ha sido posible atender en los dos últimos años”.
“El 100% de las solicitudes de actuación presentadas por los regantes de la provincia, un total de 21, van a ser atendidas por parte dela Diputación”, ha insistido el presidente, quien ha reiterado que la institución provincial “está colaborando de manera prioritaria con las comunidades de regantes y los agricultores de la provincia”. En este sentido, ha detallado algunos de los proyectos que han contado con la colaboración de la Diputación como el de mejor aprovechamiento y gestión del recurso de Campo de Salinas, San Miguel y Santo Domingo o la ampliación de infraestructuras hidráulicas y mayor aportación de caudales de las Comunidades de San Onofre y El Barranco.