FOTOS: PEPE OLIVARESELCHE. La Diputación de Alicante está dispuesta a asumir su particular 'deuda histórica' con el municipio ilicitano. Algo de lo que ha venido dejando constancia en últimas fechas principalmente con el compromiso del Palacio de Congresos, y que continuará, según el presidente Carlos Mazón, por la importante compra de bien el Aula de Cultura de la Fundación CAM, o bien del antiguo Cine Capitolio, este mismo año. Un desembolso preparado de 4,5 millones de euros que anunció este jueves en un acto en el Parque Empresarial ante más de un centenar de empresarios e integrantes de plataformas civiles en una jornada organizada por Cedelco. Sin embargo, no fue el único anuncio, porque el también candidato del Partido Popular a la Generalitat aseveró que abrirán una sede de Suma en Carrús.
Una cita de peso la del jueves en la que por momentos, y de forma inevitable, como el propio Mazón reconocía de forma desenfadada, había amagos electorales por el acercamiento a los comicios de mayo, así como que él es candidato autonómico y líder del PP en la provincia. Al finalizar la exposición y el gran anuncio, que arrancó un aplauso, y que no fue el único de la mañana, hubo un turno de preguntas en el que empresarios del polígono de Carrús le plantearon la necesidad de mejoras en el mismo. A lo que, de forma inesperada, Mazón no se resistió a anunciar que planean la apertura de una sede de las oficinas de Suma en Carrús. Eso sí, sin especificar en qué zona del barrio, ni plazos, ni inversión. Aunque sí incidió en que se está trabajando para esa apertura realmente. Algo que el pasado año también había reivindicado el propio alcalde Carlos González en los momentos de más tiranteces entre Ayuntamiento y Diputación a colación del Palacio de Congresos.
Y no solo habló de Suma, también del yacimiento de La Alcudia, del que se presupone que pretende impulsar. Un par de pequeños anuncios que en cualquier caso quedaron tapados por la compra de uno de los dos inmuebles mencionados para los que la Diputación destinará 4,5 millones de euros procedentes también del remanente de tesorería de la entidad. Una jornada en la que Mazón, en calidad de presidente y de candidato, como ya hiciera con el tranvía, arrancó varios aplausos e intentó erigirse como la alternativa para rellenar el hueco que sienten colectivos y empresarios en la ciudad por la falta de inversiones de la Generalitat; entendidas como grandes proyectos para la ciudad, más allá de las inversiones ordinarias en Sanidad o Educación con el Edificant, que son las que más peso han tenido estos años.
En este sentido, Mazón señaló que han sido 22 millones de euros los invertidos en la ciudad de 2019 a 2021, y que serán 41,5 cuando finalice este año. Después de repasar la inversión en ayudas de la covid, bonos comercio —habrá de nuevo en navidad—, palma blanca o carriles bici, justificaba con segundas dirigidas al Cap i Casal e incluso Moncloa, que "el dinero en Elche no es un gasto sino una inversión", y apelaba también a alejarse de las comparaciones con otros, en clara referencia a Alicante para evitar posibles divisiones. "La división y la polémica no ayudan", decía el presidente, quien justificaba pedir el informe como mínimo sobre el TRAM como posible instalación en Elche, aludiendo a que "si hay que esperar a otras administraciones no acabamos, no sea que en unos meses haya cambio en la Generalitat y entonces haya que impulsar estos estudios".
El líder provincial, conocedor de los anhelos de la ciudad, y por ello también escudado en el candidato local Pablo Ruz, a quien mencionó varias veces para dejar poso electoral, reivindicó que "Elche no tiene por qué renunciar a la intermodalidad como la tienen Valencia o Alicante, si tenemos que esperar a que mejoren las Cercanías...". Esta última era uno de los argumentos esgrimidos por el alcalde para rechazar la propuesta de Mazón, que sabe que no tiene competencias para el tranvía, pero entiende que no es excluyente de impulsar un estudio, "como ya se hizo para gestar el hospital de Sant Joan, cuyos terrenos pagó la Diputación". "Yo asumo nuestra deuda histórica", indicó.
En cuanto al anuncio de la sede cultural en la ciudad y la propuesta de compartir para él el fondo del Mubag, el MARQ y sus elementos arqueológicos, pictóricos, así como los conciertos de la Orquesta ADDA Sinfónica o jornadas literarias con el Gil Albert a modo de subsede, el presidente quiere que esté en marcha en 2023. Sea el antiguo Capitolio y Zara o bien el Aula CAM, considera que son edificios históricos "que no podemos permitir que se pierdan", de los que el Ayuntamiento conocía la intención de la Diputación, que señala que "se pueden comprar este año", y cuyo valor individual está entre 3,5 y 5 millones cada uno. Aunque tan solo ha habido contactos con la Fundación CAM. Ya conocen la tasación que tiene y se han valorado unos criterios técnicos para decidir entre uno de los dos edificios. En el caso del aula de la entidad bancaria, habría que acometer además distintas reformas para adecuar el espacio.
Sea este o el Capitolio, la Diputación aportaría un delegado del inmueble y una nueva dotación básica para las colecciones o representaciones. "Lo antes que entremos, menos costará, estos edificios están durmiendo en el sueño de los justos sin que nadie dé un paso adelante y nosotros lo vamos a hacer al menos con uno de los dos porque lo más caro que hay es el deterioro".
Antiguo cine Capitolio / PEPE OLIVARESPor otra parte, sobre el Palacio de Congresos, tendría un coste de entre 25 y 30 millones según el presidente, y se han consignado ya 310.000 euros para la licitación del estudio, proyecto y ejecución del futuro Palacio de Congresos. "Los pliegos están ultimándose", señala, aunque queda el estudio de tráfico que compete al Ayuntamiento, otra cuestión de cara al futuro diseño. Asimismo, se ha aprobado en Junta de Gobierno la disposición de los 4,5 millones de euros para la expropiación forzosa de los terrenos frente a la universidad, pero aún hay que aprobarlo en pleno. El trámite para la expropiación está en marcha en Urbanismo, y se espera que se pueda ejecutar este año. Una vez se haga, la Diputación otorgará una ayuda directa al Ayuntamiento para sufragar el coste.
Por último, eso sí, Mazón lanzaba otra pulla y a la vez propuesta a la Generalitat, "nosotros hemos dicho que si la Generalitat Valenciana no está dispuesta a asumir ni un euro, la Diputación sí. No sé si es peor o en el mejor de los casos, lo abordaremos al 100%, pero me gustaría que la Generalitat mostrara su predisposición en Elche, como ha hecho con el Palacio de Congresos de Alicante". Aludía también el presidente y candidato, que el Consell "no ha asumido la deuda histórica de Elche", aunque pide como mínimo que "al menos en la promoción, en la gestión y el día a día sí que nos eche un amano, porque la promoción internacional para poder captar congresos es fundamental. Tiene unos resortes a los que Ayuntamiento y Diputación no llegamos solos".
La Diputación y Mazón tratan de ganar peso en Elche con proyectos públicos y privados a un año de las elecciones
