La burocracia obliga al Hércules a usar el aeropuerto de Santiago y no el de León

ALICANTE. Cosas de la burocracia. A diferencia de la Ponferradina, cuyo avión procedente de Alicante pudo tomar tierra en el Aeropuerto de León superada la medianoche del domingo al lunes, el Hércules no podrá hacer lo propio para regresar a casa tras el partido en El Toralín.

El club blanquiazul y más concretamente Viajes El Corte Inglés, la agencia contratada, se han encontrado con que el uso civil (es una base aérea) de ese aeropuerto más allá de las 22:30 horas queda limitado a casos extraordinarios, entre los que se encuentran vuelos chárter de equipos de fútbol pero de la provincia (al parecer hay un convenio suscrito al efecto con el Ministerio de Defensa). Se trata de un problema con el que ya se topó, sin ir más lejos, el Cartagena hace dos semanas y que obligará al Hércules a emplear el Aeropuerto de Santiago, a casi 200 kilómetros de Ponferrada, algo que hará no solo para el regreso, también de cara a la ida.

No es que el aeródromo de León esté a lado de Ponferrada precisamente (son 100 kilómetros de carretera los que separan a ambos puntos), pero es prácticamente el doble de tiempo (dos horas) el que hay que invertir entre la localidad leonesa y el Aeropuerto de Santiago que entre Ponferrada y el de León (una hora).

El Hércules se desplazará en un ATR 400, una aeronave impulsada por dos motores turbohélice con una capacidad cercana a las 50 plazas (en función de la configuración) y que se emplea habitualmente en vuelos regionales. Volará a Santiago el viernes, hacia las tres de la tarde, trasladándose a continuación por carretera a Ponferrada donde quedará instalado su cuartel general. El regreso será tras el partido, también vía Aeropuerto de Santiago.