ALICANTE, (EFE). La aerolínea islandesa de bajo coste Play ha desembarcado en España este verano con el lanzamiento de tres nuevos vuelos desde Barcelona, Alicante y Tenerife a Reikiavik, con dos frecuencias por semana en cada ruta.
La compañía, que ofrece 2.304 plazas adicionales por semana entre España e Islandia, prevé alcanzar durante este verano una ocupación de los vuelos de entre el 85 y el 95 %, "a pesar de las complejidades que presenta el contexto actual".
Play, fundada en 2019, ha inaugurado este verano sus operaciones a nivel global con un primer vuelo entre la capital islandesa y Londres el pasado 24 de junio.
En España, inició su actividad el 29 de junio entre Tenerife y Reikiavik (martes y sábado), y siguió con Barcelona el 16 de julio (lunes y viernes) y Alicante el 23 de julio (martes y sábado).
Mientras que Tenerife y Alicante son servicios regulares durante todo el año, los de Barcelona son estacionales, con un plan de vuelo programado hasta finales de octubre y un reinicio previsto para abril de 2022.
"A la hora de planificar nuestras operaciones, tuvimos claro desde un principio que tanto Tenerife como Alicante y Barcelona debían figurar en nuestra red de rutas", explica en un comunicado el consejero delegado de la aerolínea, Birgir Jónsson.
A partir del próximo mes de diciembre, Play añadirá Gran Canaria a su red, ampliando así su presencia en España y consolidando su apuesta por destinos de ocio en el sur de Europa.
En el largo plazo, la compañía prevé agregar más frecuencia a los destinos existentes y extender la temporada en otros hasta ahora estacionales, como es el caso de Barcelona.
Para el verano de 2022, Play estudia la posibilidad de sumar nuevos destinos en España.
La aerolínea, que actualmente opera tres aviones A321neo, planea incrementar su flota a seis A320neo y A321neo en el segundo trimestre de 2022 para comenzar su servicio a EE. UU.
A largo plazo, la ampliación de la flota alcanzaría alrededor de 15 aviones para 2025 en sus servicios a destinos en Europa y América del Norte.
Para entrar a Islandia, los viajeros deben presentar una prueba de COVID-19 negativa realizada dentro de las 72 horas anteriores al vuelo.
Los viajeros vacunados pueden hacerse una prueba de PCR o una prueba rápida de antígenos. Los viajeros no vacunados deben realizar la prueba al llegar a Islandia y permanecer en cuarentena hasta que se obtengan los resultados.